Encuentro duro y farragoso como se esperaba. El Getafe defendió, jugó en largo e intentó aprovechar sus ocasiones. Una acción fatal de Frenkie De Jong hizo caer a Djené dentro del área, y Jaime Mata engañó a Neto para anotar un gol que vale 3 puntos. A continuación, las notas del encuentro:
Neto – 7. Siguió en su buena línea a pesar del mal partido del conjunto. No acertó a parar el penalti, pero estuvo muy seguro en las ocasiones de peligro del Getafe, e incluso sacó un mano a mano que acabó en el larguero del Barça.
Dest – 7. Un oasis en el juego del Barça. Se notan las ganas que tiene de aportar y entiende a la perfección el juego colectivo. Apunta a revivir la banda derecha, que ahora mismo es un desierto absoluto.
Lenglet – 6. Correcto. Salió bien al corte, peleó contra los delanteros azulones y sacó el balón con cierta claridad. En ocasiones se dejó llevar en exceso por las provocaciones del rival y eso jugó en su contra. Partido oscuro, pero correcto.
Piqué – 6. En la misma línea que el francés. Abortó el escaso peligro que creaba el Getafe y estuvo seguro en los balones aéreos, que llegaron continuamente tras los balonazos largos. Gerard sí que está curtido en este tipo de batallas y estuvo más sereno que Lenglet.
Sergi Roberto (87’) – 3’5. Una vez más, desaparecido. La banda derecha es un desierto con él. Falta enorme de recursos en ataque, aporta poco y no genera. La llegada de Sergiño Dest debería relegarlo al banquillo, ya que ahora mismo solo hay un lado por donde atacar.
Busquets – 6. No brilló, pero tampoco aportó negativamente en un partido donde no hubo medio del campo. Está muy lejos de su nivel de antaño, y los malos partidos de De Jong provocan que el nivel del doble pivote sea muy justo para la categoría del Barça.
De Jong (80’) – 4’5. Lleva varios malos partidos consecutivos. Koeman le ha dado galones y confianza, pero el holandés no aparece. Busquets, que hace patente su declive, está mejor que él. Hizo el penalti que supuso el único gol del partido en una acción muy desfortunada.
Dembélé (62’) – 4. Caótico. Tiene mucho talento y es peligroso con el balón en los pies, pero le faltan muchos fundamentos colectivos. Tiene la capacidad de aportar amplitud en las bandas, que es lo que necesita el Barça, pero todavía tiene mucho camino por delante para encajar en el conjunto. Aun así, una jugada suya generó la mejor ocasión del Barça en todo el encuentro.
Griezmann (80’) – 1. Habló, protestó y tuvo lo que quería. Empezó en el centro, donde en teoría se encuentra más cómodo, pero la tónica fue la misma. No participa, no aparece, no genera. Tampoco tiene un lateral que aproveche sus espacios, aunque individualmente tiene un gran problema. Erró un mano a mano que hubiese cambiado por completo el partido.
Pedri (62’) – 7’5. El mejor del partido. Movió el juego perfectamente, generó espacios y dejó solo a Griezmann en un mano a mano que el francés falló. El único jugador de ataque que estuvo acertado. Mucho talento para el Barça con tan solo 17 años.
Messi – 6’5. Fue el que más disparó, pero no tuvo acierto. No fue su mejor día, y en un partido tan trabado se esperaba que apareciese. Se llevó un codazo de Nyom que no acarreó ni tan solo tarjeta amarilla. Sigue siendo el mejor, pero no encuentra sus espacios en un centro del ataque normalmente atascado.
Coutinho (62’) – 5. Jugó la última media hora, pero con el equipo ya desquiciado no pudo organizar ni encontrar los pases que normalmente filtra ante equipos con un juego más abierto.
Ansu Fati (62’) – 5’5. Valiente y peleón, cayó en el área tras un empujón que no fue a más. No le salieron la mayoría de las acciones que intentó. De hecho, ningún extremo estuvo afortunado en su actuación.
Braithwaite (80’) – 6. Fue el único de los revulsivos que entendió lo que necesitaba el Barça. Se movió al espacio, intentó arrastrar defensas y casi tiene premio en un centro de Sergiño Dest que Djené despejó al larguero propio para alejarlo de la testa del danés. Sensación de que debería tener más minutos en el “9”.
Trincao (80’) – 5. Desafortunado. No pudo completar ninguna acción de desborde y a penas generó peligro. No era un partido ni para él ni para nadie con una defensa tan atrasada.
Riqui Puig (87’) – 5’5. Disputó los últimos minutos para dar algo de consistencia a un centro del campo que había desaparecido por completo con los cambios atacantes. Tal vez no tenga sitio en una situación tipo, pero es necesario en algunas ocasiones concretas alguien que enlace el centro del campo con el ataque.
Koeman – 4’5. Hizo los cambios tarde y no supo encontrar alternativas al juego cerrado del Getafe. No es responsable de la falta de puntería, pero sí del planteamiento. No supo dar argumentos futbolísticos para contrarrestar la dureza física del rival.
