La temporada en Can Barça está siendo un desastre hasta la fecha principalmente por los problemas institucionales en los que lleva sumergido el club desde hace varias temporadas, que han acabado desembocando en una ausencia de presidente legítimo y unas elecciones tardías que no ayudan a paliar y mejorar el pobre proyecto deportivo que se ha llevado a cabo últimamente. La planificación de la plantilla ha sido impropia de un club como el FC Barcelona, y esto se ha visto afectado en una posición tan sensible de sustituir como la de defensa central.
Con la lesión de gravedad de Gerard Piqué, el bajo rendimiento de Clement Lenglet y la ausencia de efectivos en esta parte del campo, tanto Mingueza hace unas semanas como Araújo a partir de ahora se van a ver con un exponencial aumento de minutos y responsabilidad en el primer equipo. Y teniendo en cuenta que la posición de defensa central es posiblemente la más complicada para desempeñar en el Barcelona actual, sobre todo teniendo en cuenta que muchas veces tienen que cerrar ambos atrás, sin acompañantes y totalmente expuestos a contraataques rivales, Araújo va a disponer de un master adelantado.
A pesar de todos estos condicionantes, Ronald Araújo ha demostrado al menos estar preparado para afrontar este difícil reto que tiene por delante, pero que puede ser beneficioso para ambas partes si logran desarrollar al joven uruguayo y asentar después de muchos años a un central de la cantera en el primer equipo. Araújo sobre todo ha destacado por sus habilidades y cualidades puramente defensivas. Gran juego aéreo, buen 1v1 y capacidad de marcaje al hombre. Si bien es cierto que todavía tiene que mejorar varias características muy demandadas en el primer equipo, como la salida de balón –aunque no sea en absoluto su gran punto débil-, el canterano ya ha demostrado que también es capaz de hacer desplazamientos en largo y que no carece de un mal pie.
Ronald Araújo pasa a ser el seguro de vida al que se aferrará el FC Barcelona en defensa. Ante el Levante UD demostró la personalidad para comandar la línea defensiva a pesar de haber jugado junto a un más experimentado Lenglet, al que por cierto corrigió en varias ocasiones y evitó un par de ocasiones manifiestas de gol por parte del conjunto granota. Y no solo eso, sino que cuando el equipo tuvo que juntar líneas y tratar de amarrar la victoria en área propia, Araújo sobresalió por encima del resto, demostrando su enorme poderío aéreo.
En una temporada en la cual el conjunto blaugrana estará lejos de conseguir los éxitos deportivos a los que lleva años acostumbrando, el gran valor estará en desarrollar a los jóvenes que deberían de ser el futuro del FC Barcelona. Por ello, Araújo está ante la gran oportunidad de demostrar que está capacitado para ser parte de la primera plantilla a todos sus efectos.