El partido, vestido de irrelevante, venía quemando desde los días previos. Derrota dolorosa ante el Girona, cruces de declaraciones, Xavi cuestionado y lo de la convocatoria. Lewandowski, Gündogan y Araújo, que a priori no iban a entrar en la lista, terminaron viajando después de un toque de atención de Laporta, según cuentan medios como Rac1. En el caso del polaco, terminó siendo titular. El dinero que significa una victoria europea, silenciar el ambiente enrarecido y los rostros nuevos eran los grandes alicientes de un partido que luego demostró no necesitarlos.

    Ferran Torres en el gol (Photo by Pedro Salado/Getty Images)

Los problemas de los culés se hicieron presentes desde el primer minuto, condensados en la figura de Oriol Romeu. Sin la cintura ni la finura para traspasar la primera línea, el equipo blaugrana sufría en la salida de balón. Tanto, que en el minuto uno Vermeeren ya alentaba la pesadilla de Xavi tras un mal pase del propio centrocampista de Ulldecona. El Barça, sin centro del campo, con Fort como debutante y repleto de dudas, se veía con la misión de remontar en los 90 minutos siguientes.

El del empate tardó algo más de 30 minutos en llegar: se lo inventó Lamine, lo definió Ferran. Desde la derecha, el aún adolescente condujo lento, mientras calculaba la trayectoria del pase filtrado que iba a dejar solo al tiburón ante un nuevo gesto de reivindicación en la Champions. Terminaba la primera parte. Nervios en la zona técnica.

    Fermín, preocupado en una jugada del partido (Photo by Joris Verwijst/BSR Agency/Getty Images)

La segunda parte comenzó como la primera: con susto. En este caso doble para los culés: un gol anulado después de un fallo múltiple de la defensa blaugrana y una tarjeta roja corregida a Sergi Roberto. El Var le daba una segunda oportunidad al Barça, pero a la tercera la suerte no jugó del lado de los visitantes y el Amberes se volvió a poner por delante en el marcador. De nuevo, el protagonista de la foto fue Oriol Romeu. Tardó en tomar una decisión con el balón y cuando quiso dar el pase el balón ya estaba dentro de la portería de Iñaki Peña. 2-1. Entraron Gündogan, Pedri y Cancelo al recate y el equipo de Xavi mejoró sus prestaciones. Con el Barça volcado, llegaba el descuento. Marc Guiu, que había entrado por Lewandowski minutos atrás, se vestía de héroe a balón parado. Tiene estrella. Pero pocos segundos después, el Amberes fulminaba definitivamente al Barça con un gol que dejaba helado a todos los culés. Y a Xavi. La pesadilla culé prosigue. ¿Hasta cuándo?