Recuperar al equipo tras el varapalo ante Unionistas de Salamanca (4-1) era el principal reto que tenía Rafa Márquez para el partido ante el CD Lugo. Por su parte, el conjunto gallego, instalado en mitad de la tabla, llegaba al Estadi Johan Cruyff tras encadenar tres derrotas consecutivas.
El partido anduvo muy plano durante la primera parte, a excepción de alguna internada por parte de Naim, Pau Víctor y Marc Guiu. No hubo la precisión necesaria como para transformar las ocasiones generadas y a los azulgrana les costaría horrores batir la portería de Lucas Díaz. Los de Roberto Trashorras propusieron un partido muy serio a nivel posicional y yendo duro al choque para contrarrestar el peligro. Prueba de ello una polémica acción sobre Unai Hernández al borde del área en la segunda parte, por la que amonestaron a Marc Guiu tras protestar.
Mbacke y Percan, dos lesionados
La mala noticia que deja el partido son sin duda las lesiones. Por un lado, la de Mbacke en el tobillo izquierdo y por otro la de Percan. El central senegalés fue sustituido por Alexis Olmedo en el primer tiempo y el delantero leonés se retiró dolorido al poco de haber ingresado al terreno de juego, por lo que los azulgrana acabaron el encuentro en inferioridad numérica. Para conocer el alcance de ambas lesiones habrá que esperar al parte médico, aunque Márquez ya ha indicado su preocupación al acabar el partido y parecen ser de gravedad.
Persistencia y victoria
Asimismo, no todo iba a ser negativo. Y es que tras mucha insistencia y algo de fortuna, el cuadro local consiguió adelantarse en el marcador con un autogol de Andrés Castrín. Ya lo indicaba Moha en zona mixta: “Nos estaba costando encontrar portería estas semanas”. El gol, a pesar de no ser propio, fue una liberación y la voracidad goleadora de hace unas jornadas se volvió a echar en falta para que los culers cerraran antes el encuentro y no sufrieran en los últimos minutos.
Precisamente, Moha y Gerard Martín volvieron a ser dos de los protagonistas que partieron de inicio. Rafa Márquez volvió a explicitar la confianza que tiene en ambos, así como la gran evolución del zaguero azulgrana desde que llegara procedente del Cornellà este pasado verano. A diferencia de las 3.600 personas ante el Arenteiro, en el día de hoy han sido 1.600, pero también se han hecho oir y los jugadores les han rendido agradecimiento con los habituales cánticos que hacen de forma conjunta una vez finalizado el encuentro.
La próxima parada será el sábado ante la Ponferradina a domicilio (16:00 horas). Un rival directo por las aspiraciones de ascenso que alberga la cuarta plaza con 57 puntos, a cuatro de los azulgrana (61 puntos). Con seis puntos de distancia respecto al Deportivo quedarán dos fechas más para viajar a La Coruña, no sin antes seguir haciendo los deberes y meter presión al líder.