Eran muchos los que pensaban que, tras la exhibición en St. Pölten, el Barça levantaría el pie del acelerador para el último compromiso del mes de noviembre antes del parón. Sin embargo, Pere Romeu prefirió no especular y alineó un once perfectamente titular. Las mismas jugadoras que conquistaron Madrid un Clásico más, pero con un par de ajustes debido a las bajas: Engen por el carril derecho para defender con línea de tres con María León y Paredes, y con un doble pivote formado por Patri y Walsh con Aitana más adelantada, jugando con total libertad por detrás del tridente de ataque.

La calidad de la alineación se correspondía con el espectacular aspecto que presentaba un Johan Cruyff prácticamente lleno, y con ganas de disfrutar de una gran jornada de domingo en un horario poco habitual. Antes del inicio del partido, ‘La Reina’ hizo acto de presencia en el feudo azulgrana. Tras confirmarse su baja para las próximas tres semanas por una lesión muscular, Alexia fue obsequiada con un doble reconocimiento, Por un lado, una placa conmemorativa por llegar a los 200 goles con el Barça y, por el otro, el MVP del mes de octubre de la Liga F, tras firmar un arranque de temporada formidable con 8 goles y 5 asistencias, que recuerdan a la mejor versión de ‘La Reina’.

La hora no fue el único dato poco habitual del partido. Ni tres minutos llevaban sobre el terreno de juego cuando Babdije adelantó al Costa Adeje Tenerife tras completar un rápido contraataque. El gol tempranero de las tinerfeñas cogió por sorpresa a las azulgranas que, al igual que en el derbi ante el Espanyol, tuvieron que sudar más de la cuenta para superar la compacta línea defensiva del rival. No fue hasta el minuto 38 que el Barça consiguió derribar el muro tinerfeño y, esta vez, no podía ser otra que Irene Paredes.

Ya lo había intentado desde la distancia minutos atrás, pero envió el balón a las manos de Echezarreta. Después de haber sido el centro de todas las miradas durante toda la semana debido a la polémica con la Selección, Paredes volvió a dar que hablar con un disparo lejano que entró de lleno en la portería del Tenerife. La capitana lo celebró con un gesto de rabia y sus compañeras no dudaron en ir a abrazarla, conscientes de lo que significaba el tanto, tanto a nivel personal como colectivo; el camino hacia la remontada se había abierto.

Tan solo dos minutos después, Ewa Pajor completó la remontada de las azulgranas, cazando un rechace en el borde del área pequeña y empujando el balón con la punta del pie, por debajo de las piernas de Echezarreta. La killer polaca no falló a su cita con el gol y llegó a la decena en Liga. La remontada se produjo justo a tiempo del descanso y, en el minuto 47, Graham no falló desde los once metros para certificar la reacción azulgrana con 3 goles en menos de 7 minutos.

Tras el descanso, el Barça salió a rematar a un Tenerife aturdido tras el tramo final de la primera parte. Clàudia Pina, que nunca se pierde una fiesta, no quiso ser menos y volvió a ver puerta antes de llegar a la hora de partido. ‘Pinagol’ volvió a intentarlo por segunda ocasión desde fuera del área con un disparo ajustado y, esta vez, terminó entrando dentro de la portería.

Justo después del cuarto gol, Pere Romeu empezó a estirar al equipo para dar entrada a Kika y Brugts en lugar de Pajor y Engen. Las rotaciones siguieron su curso natural y, a falta de 20 minutos del final, Jana, Marta y Vicky sustituyeron a Ona, Irene y Pina. Los cambios no tardaron en hacer efecto y, en esta ocasión, Esmee Brugts fue la encargada de poner ‘la manita’ en el marcador.

La neerlandesa obtuvo su recompensa en forma de gol tras un acción individual que comenzó con un pase de Graham, continuó con un par de recortes de Esmee, y concluyó con un disparo ajustado al primer palo desde la frontal. El quinto tanto fue la guinda del pastel para un Barça que puso el broche de oro a un mes de noviembre perfecto y que, después del parón, espera poder mantener este ritmo durante el mes de diciembre para completar un 2024 inolvidable.