Hay noches donde un equipo puede perder y volver a ganar todo en una misma noche. Lo sabe bien el Barça, que venció por 1 a 2 al Valencia C.F. en un encuentro duro, donde se vio obligado a remontar un partido que perdía y debía ganar para mantener sus posibilidades de ganar La Liga.
Tuvo pronto el F.C. Barcelona la primera ocasión del partido, en una jugada colectiva donde Griezmann se inventó un pase filtrado para De Jong, que dejó el balón a Pedri dentro del área pero el disparo del canario salió lejos de los tres palos. Era el tercer minuto del encuentro. Poco más tarde, en el 13’, Cillessen detuvo la mejor ocasión que tuvo su exequipo en la primera parte, cuando Messi centró una falta lejana, Araujo remató dentro del área y el holandés despejó, manteniendo el empate.
Con el Valencia colocando una defensa de cinco jugadores, era previsible que el Barcelona tuviese la iniciativa en ataque ante un equipo plantado al contraataque. Pero el equipo Che mostró carácter tras diez primeros minutos en los que se acomodó en el campo, y se asomó con peligro a la portería culé. En el minuto 25, Gayá se escapó y Racic llegó solo a la frontal del área, aunque su disparó fue inofensivo para Ter Stegen.
Messi era, una vez más, el que articulaba las ofensivas blaugranas mientras el conjunto valenciano mostraba solidez defensiva con sus tres centrales e incluso salía con el balón jugando cuando podía. El Barça no pudo superar la defensa valencianista y con el empate llegó al descanso.
El Valencia iba a dar el primer golpe en la segunda parte. Un contraataque dejó a Guedes mano a mano con Ter Stegen, pero el alemán anuló la ocasión. Y en el córner posterior, Gabriel Paulista se internó en el área pequeña y marcó de cabeza. Era el minuto 50, el marcador se ponía 1 a 0 y la cara de estupefacción del portero culé lo decía todo.
La alegría del equipo entrenado por Javi Gracia iba a durar seis minutos. Lato provocó con la mano un penalti para el Barça. Messi disparó flojo, Cillessen despejó pero en cuestión de segundos se sucedieron los rechaces y el balón volvió al astro argentino, que empujó el balón a la red. Volvía el empate al encuentro.
No es la primera vez, y tal vez tampoco la última, en la que el equipo culé despierta tras recibir un gol y va en búsqueda de la remontada. Y un jugador en búsqueda de la redención ante los ojos de la afición, Antoine Griezmann, iba a materializar el segundo gol. Jordi Alba centró para De Jong, Cillessen volvió a aparecer para tapar el cabezazo del mediocampista y el “Principito” aprovechó el rechace en la línea de gol para marcar. Se invertía la ventaja y el equipo culé respiraba.
Una falta en la frontal del área del Valencia iba a ser la oportunidad para otra genialidad de Leo Messi. El argentino ejecutó el libre directo con una precisión de francotirador, el balón entró besando el palo y dejando estéril la increíble estirada de Cillessen. Era la culminación de la remontada en Mestalla.
Pero era pronto para dar por terminado el partido. Carlos Soler encontró un balón fuera del área y sacó de su pie un misil que Ter Stegen apenas pudo ver. Una inyección de moral para el Valencia. Apretó el Valencia en los minutos finales del partido, pero no tuvo premio.
El Barcelona se llevó los tres puntos y sigue vivo en La Liga. Quedan cuatro jornadas que pueden dar muchas sorpresas. Ninguno de los primeros clasificados está demostrando ser invencible y esto no hace más que aumentar la emoción del campeonato local. Hay Liga, pero… ¿será del Barça?
