Tras cuatro derrotas consecutivas, ganar era una obligación para el Barça Atlètic, que recibía a un Cornellà invicto desde septiembre.

Rafa Márquez planteó un once con: Arnau Tenas en portería; Álvaro Núnez, Pelayo, Chadi Riad y Àlex Valle en defensa; Álvaro Sanz, Marc Casadó y Txus Alba en el centro del campo; Juanda, Roberto y Luismi Cruz en la delantera.

El conjunto del Baix Llobregat, con Gonzalo Riutort en el banquillo, salió de entrada con: Lucas Anacker; Carlos Redruello, Andreu Hernández, Carlos Blanco, Gerard Martín; Kike López, Francesc Fullana, Isaac Nana, Gil Muntadas; Rubén Enri y Álex López.

Como suele ser habitual esta temporada, el Cornellà renunció al dominio del balón y apostó por un planteamiento defensivo, con hasta cinco jugadores en la línea de atrás y dos más muy juntas, dejando pocos espacios al conjunto local para generar peligro.

El partido empezó con un Barça ambicioso en busca del gol, pero que enseguida chocó con el muro cornellanense. A lo largo del primer tiempo, a pesar de gozar de la posesión, el cuadro local fabricó pocas ocasiones de peligro y prácticamente no amenazó la portería visitante. Las incursiones de Juanda por banda y un disparo lejano de Álvaro Sanz fueron las acciones de ataque más destacadas. En el lado positivo, cabe destacar que a diferencia de los últimos partidos, los de Márquez sufrieron muy poco en defensa; tanto Chadi como Pelayo supieron frenar bien las transiciones del rival.

La segunda parte tuvo un transcurso muy similar a la primera. El filial monopolizó la posesión, pero sin prácticamente verticalidad en sus ataques, no consiguió romper el empate a cero en el marcador. Un desmarque de Txus Alba, que fue de los pocos que intentó picar el espacio, provocó la ocasión más clara tras el entretiempo. El centrocampista remató un balón a portería que sin embargo, no tomó suficiente potencia y blocó sin problemas Anacker.

 

Foto: FC Barcelona

El técnico mexicano intentó agitar a su equipo dando entrada a Ilias Akhomach, Fabio Blanco y Álex Carbonell, pero ninguno fue capaz de romper el guion del encuentro. Víctor Barberà entró en el tramo final por Roberto, que sigue sin ver portería con asiduidad y suma solo dos goles en diez partidos. Zalaya ingresó en el terreno de juego por Pelayo, que se retiró con molestias.

El partido terminó con el mismo resultado inicial, dejando un tanto fríos a los más de 2.000 espectadores que se reunieron en el Johan Cruyff. En sala de prensa, Márquez destacó el trabajo defensivo y justificó la falta de acierto arriba en la falta de confianza de los jugadores: “No hay que olvidar que venimos de una mala racha. Quizás ha pasado factura el miedo a no perder balones. Por supuesto queríamos ganar, pero tenemos que darle valor al empate y al buen trabajo defensivo».

En zona mixta también habló Txus Alba; el canterano apeló al optimismo tras un “buen punto” y se mostró convencido en el proceso: “Los hemos intentado, no era fácil. Trabajando así estoy seguro de que las victorias llegarán”.

La semana que viene el Barça Atlètic visita el campo de Osasuna Promesas, el domingo 6 de noviembre a las 17:00. El filial es décimocuarto en la clasificación.