Duelo entre propuestas muy similares en el Johan Cruyff, con un Andorra que intentó tener y jugar el balón desde el primer minuto. El equipo de Éder Sarabia, exentrenador del Barça de la mano de Quique Setién. El Barça, por su parte, intentó hacerse con el esférico con una presión puntual y no demasiado agresiva que, al intensificarse, planteaba problemas al rival.

Tuvo el control el Andorra al inicio del encuentro, pero no encontró acciones de peligro para la meta de Iñaki Peña. Entretanto, un núcleo de unos 20 aficionados del equipo visitante ponía la banda sonora a un Johan que profesaba un silencio expectante.

El encuentro pronto tomó un ritmo lento y pesado con un Andorra que controlaba el balón, pero no le imprimía ritmo, y un Barça demasiado precipitado en la salida tras recuperación. La victoria inicial de Sarabia fue desdibujar a un Barça B que no supo someter al rival. En cambio el filial, con poco, conseguía llegar aprovechando la capacidad de estirar el equipo de Ferran Jutglà.

Poco antes de la media hora de encuentro, en una acción en la que el B supo salir bien con el balón, Jutglà progresó con cierta facilidad por la banda derecha, y en la frontal apareció Antonio Aranda, que fue el mejor en ataque, para recibir y poner el balón en la escuadra derecha con una rosca hacia fuera que pareció a cámara lenta. Sin haber hecho grandes méritos para ello, el Barça estaba por delante en el marcador.

Tras el tanto en contra, el Andorra subió el ritmo de juego y metió al B en su propio campo. Solo el dinamismo en el último tercio de Jutglà, Aranda y Rodado salvaba a un filial sin claridad en la construcción. Tuvo dos disparos el Andorra en el borde del área, pero ambos se fueron por encima de la meta de Peña.

Jutglà generó las dos jugadas de gol | FC Barcelona B

 

A falta de cinco minutos para el descanso, el Andorra cometió un error en salida de balón de los que cuestan caros. Jutglà robó, vio a Nico Ratti fuera de portería y la picó de maravilla por encima. El Barça B estaba dos tantos arriba en el marcador habiendo generado lo mínimo en el césped, y cuando parecía que las sensaciones al descanso serían positivas al menos en el luminoso, Carlos Martínez remató perfecto un centro lateral que daba alas al Andorra. 2-1 al descanso y con la previsión de sufrir en la segunda mitad.

La segunda mitad comenzó con la misma tónica, con un Andorra voluntarioso y con las entradas en el partido de Roger Riera, exjugador del filial, y Zourdine, un habilidoso extremo diestro que revolucionó la banda que defendía Arnau Solà, amonestado. El Barça intentaba generar a partir de la calidad individual al de Aranda y Jutglà, pero no era suficiente para hacer daño a un Andorra que había pulido los errores cometidos en la primera mitad.

El Barça intentó resguardarse al no poder recuperar el control del partido, y dio entrada en el partido a N’Diaye en el lateral izquierdo para frenar la potencia de Zourdine y a Matheus, que sustituyó a Jutglà para actuar en el perfil diestro, aunque más retrasado. A falta de 20 minutos para el final del encuentro, el Andorra seguía sin encontrar las ocasiones claras para igualar el encuentro.

Solà volvió a destacar con el B | FC Barcelona B

 

Peque Polo sustituyó a Rodado para aportar algo de frescura al contraataque del Barça B, dado que el Andorra se volcaba en busca del empate, y a punto estuvo de encontrar la ocasión en un balón largo que dejó pasar y no se volvió a encontrar de milagro. El Andorra apretó, dominó, y el Barça se defendió con uñas y dientes hasta el pitido final.

Vuelve el filial de Barjuan a sumar los 3 puntos, pero las sensaciones no invitan al optimismo con un equipo que se vio dominado en la totalidad del encuentro por el Andorra de Sarabia. Es la segunda jornada consecutiva, después del Castellón, en la que el equipo sufre y se ve sometido, aunque en esta ocasión el resultado cayó del lado blaugrana.