Otra noche de las que duelen. De esas que se quedan grabadas en la memoria azulgrana. Desgraciadamente empiezan a ser costumbre ya, cuando el Barça juega lejos del Camp Nou en Europa. Hoy los de Xavi han perdido por 3 a 0 frente al Bayern de Múnich en el Allianz Arena. Un nuevo 3 a 0. El tercero ya en esta campaña europea. De esta manera es imposible pasar a octavos de final de la Champions.
De nuevo, Xavi ha sorprendido con su esquema. Con una lista en la que aparecían 5 teóricos defensas, el técnico egarense ha situado un 4-3-3 clásico sobre el césped, con Araújo en el lateral, y Dest en el extremo. E, inicialmente, ha pillado a contrapié a los bávaros. Una gran presión inicial ha ahogado en los primeros instantes a los locales. Los azulgrana han salido atrevidos y motivados, conscientes que era una noche para salir a luchar.
Prueba de esta intensidad inicial son las dos amarillas que ha visto el Barça antes de los primeros 15 minutos. La primera a Busquets, tras un error gravísimo de Ter Stegen que el de Badía ha tenido que cortar con falta para evitar males mayores. Y la segunda a Araújo, fruto de una entrada para cortar una gran jugada de Alphonso Davies, que previamente no supo cortar Dest.
El Barça ha competido durante la primera media hora de encuentro. Dembélé era sin duda la gran esperanza azulgrana, y dos cabalgadas suyas han acabado en centro muy peligroso, que no ha encontrado rematador. También lo ha intentado Jordi Alba, con un remate con la derecha que ha atajado Neuer.
Dembélé en una de sus internadas. FUENTE: 20 Minutos
Todo ha empezado a cambiar con la lesión de Alba. Xavi ha sustituído al lateral titular por Mingueza, que ha jugado a banda cambiada. A partir de ahí, el Bayern ha empezado a centrar su ataque en esa banda, consciente de las debilidades del canterano azulgrana. Y solo cuatro minutos después de este cambio ha llegado el primer gol alemán. Lewandowsky ha cazado un pase a la espalda culé, ha encarado a un Piqué un poco blando y ha puesto un centro que ha rematado Müller. El alemán, pese a no tener una gran colocación, no ha tenido gran oposición de la defensa, ya que Mingueza apenas ha saltado para molestar. Así pues, su remate se ha colado dentro de la portería por centímetros, antes que Araújo sacara la bola de dentro.
Y los problemas se han agravado con el segundo gol del Bayern, justo antes de la media parte. Sané, ha recibido solo en zona de tres cuartos, ha tenido tiempo para cargar la pierna, y disparar a portería desde más allá de 20 metros. Un chute fuerte pero centrado, que, sin embargo, Ter Stegen se ha tragado. El balón ha pasado entre el brazo y la cabeza del meta alemán.
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De Jong abatido tras el segundo gol del Bayern. FUENTE: Eurosport
En la segunda parte la intensidad general ha bajado considerablemente. Xavi ha dado entrada a Nico por Dest, que se ha visto desbordado en todo momento por Davies. En el primer minuto, Sané ha perdonado la sentencia a portería vacía. Pero pese a esta muestra de piedad involuntaria, el Barça no ha sabido rehacerse. Los únicos brotes de frescura han venido, como no podía ser de otra forma, de los jóvenes. Nico y Gavi han seguido intentándolo sin éxito durante la segunda parte.
El derrumbe final azulgrana ha llegado con el tercer gol del Bayern, en el ecuador de la segunda mitad. Un gran cambio de orientación de Lewandowsky ha llegado a Davies, que se ha ido con mucha facilidad de Araújo, y ha servido el gol en bandeja de plata a Musiala. El joven centrocampista alemán tampoco ha tenido mucha oposición cerca del área pequeña.
A partir de ahí, el Barça ha naufragado por el césped del Allianz. Nada que destacar el juego culé, que no ha recibido más goles en contra porque los locales no han estado acertados.
El Barça cae en fase de grupos por primera vez en 20 años, y volverá a jugar la Europa League después de 17 temporadas. Es una oportunidad para que los de Xavi se levanten, y puedan mostrar su juego en una competición en la que se sentirán con más comodidad a la hora de competir.