La hora de Franck Kessié

El Presidente (Costa de Marfil, 1996) aterrizó en Barcelona desde Milán como apuesta personal de Xavi, que junto al resto del cuerpo técnico siempre ha defendido unas cualidades singulares del africano que podrían marcar la diferencia en el esquema de juego blaugrana. Al protagonista de la medular, el veterano Busquets, le quedan pocos tangos futbolísticos que bailar sobre el terreno de juego y los últimos batacazos culés en todas las competiciones pedían desesperadamente un cambio de dinámica para poder volver a brillar: más músculo y personalidad en el centro del campo.

Aunque de momento ha disfrutado de pocos minutos en lo que va de temporada, Kessié ha resultado vital en algunos puntos clave, entre los que destaca la asistencia a Jordi Alba para poner el 1-0 el domingo ante el Sevilla y elevarse la friolera de ocho puntos por encima del Real Madrid en la clasificación. El compromiso del marfileño queda fuera de toda duda, más allá de su voluntad de aprender castellano desde que llegó a la Ciudad Condal: el mercado de invierno vino repleto de rumores de una posible vuelta de Franck a la Serie A, tras quedarse el Milan fuera de la Coppa de Italia y estar necesitado de refuerzos, y tanto el jugador como Xavi recalcaron que el objetivo es que el centrocampista triunfe vestido de blaugrana. Tampoco el Tottenham de Conte fue capaz de que subiese a un avión rumbo a la Premier, como tantos y tantos jugadores de La Liga, en búsqueda de un perfil que pueda suplir al lesionado Sarr en el medio campo.

Pero como bien apuntó el técnico egarense ayer en rueda de prensa, la paciencia es la mejor virtud, y el esguince sufrido por Busquets en el Camp Nou es la oportunidad que tanto esperaba Kessié. El esquema de cuatro centrocampistas le podría ubicar en el once titular en los próximos encuentros, en los que el futbolista tendrá la oportunidad de lucir las capacidades que le trajeron el club. Ya en este 2023 el centrocampista ha visto paulatinamente aumentada su presencia sobre el césped, participando en los diez partidos que ha jugado el equipo en este último mes y medio. Según Xavi, todo gira en torno a la adaptación y el saber esperar: “Kessié no estaba teniendo muchos minutos, el otro día salió y marcó diferencias. Yo estuve 3 años con el dorsal 26 y jugando con el filial cuando tocaba. Las nuevas generaciones quieren ir demasiado rápido, les diría a los jóvenes menos habituales que tengan paciencia.”

Hasta ahora, Pedri, Gavi, Busquets y Frenkie eran el cuarteto de cuerda afinado a la perfección, los protagonistas del eje ganador que avala a Xavi con sus diez victorias consecutivas: cinco en Liga, tres de Copa y otras dos para llevarse la Supercopa. Kessié entraba en liza únicamente como recambio, pero aprovechando al máximo cada oportunidad: ha jugado 394 minutos de esos partidos y ha firmado un gol y tres asistencias con su marca personal. En los otros 21 partidos de 2022 previos a esta racha, había jugado prácticamente lo mismo y solo anotó un gol, ante el Viktoria Plzen en Champions League.

Ahora, la falta del Pulpo de Badía durante al menos un par de semanas cambiará esta dinámica. La decisión de Xavi en el momento de la lesión de Busi, dejando el esquema intacto e introduciendo a Franck como suplencia, no solo funcionó a la perfección sino que da una gran pista del guion táctico de los próximos encuentros.

En definitiva, su llegada como agente libre y su buen desempeño en el rol inculcado por el entrenador hasta el momento resultan en una estancia en Barcelona del marfileño muy positiva, si bien algo discreta para el protagonismo del que disfrutaba en Italia. Xavi decidirá si apuesta en firme por el centrocampista estos días o le da galones a Sergi Roberto, la otra opción sin cambiar la pizarra. El tiempo también dirá si Franck es uno de los elegidos para salir en el mercado de verano, repleto de nombres de jugadores blaugranas que copan las páginas mediáticas de los últimos días.

Lo relevante ahora es lo que suceda en La Cerámica, no en el mercado veraniego. Aquí se apuesta por el Presidente.