Cuatro goles como cuatro soles. Fueron los registros con los que se marchó Salma Paralluelo de Zubieta, cuatro dianas anotadas entre el minuto 22 y el 57 para protagonizar la goleada (1-7) a la Real Sociedad de Natalia Arroyo. Con este nuevo saco a sus estadísticas personales, ahora de 13 goles en la competición doméstica, la exatleta se coloca en el segundo cajón del podio de ‘killers’ de la Liga F -el liderato continúa propiedad de la también blaugrana Graham Hansen, con 15 dianas.

El mérito llega mucho más allá de firmar un póker en algo más de media hora, hazaña que Salma ya consiguió en el Barça-Sevilla (su última gran fiesta anotadora) antes de marcharse al vestuario en el descanso. Son registros solo al alcance de arietes como Jenni Hermoso, que arrolló también al Sevilla en 2021, esa vez a domicilio, vistiendo la camiseta blaugrana con un abrumador luminoso de 10-1.

Paralluelo fundiéndose en un abrazo con Vicky López, que abrió la lata. Fuente: FCBFemeni

No, la valía y la calidad de la futbolista se refleja, más que en sus números, en la belleza de sus tantos. Además de lo abultado de un póker, la culé dejó auténticos golazos en las retinas de los aficionados, siendo uno de ellos desde el pico del área lamiendo las telarañas de la escuadra de Zubieta y otro de falta directa.

Con 20 años, Paralluelo ya ha despejado cualquier duda y escepticismo sobre que su carrera sería ‘arruinada’ primero por cambiar el fútbol por el atletismo; y después por falta de minutos al cambiar el Villarreal por el Barça. No contenta con callar bocas simplemente por ganarse un puesto inamovible en la delantera del mejor equipo del mundo y de la Selección, los números de la zaragozana a estas alturas de la temporada comienzan a ser dignos de jugadora de clase mundial.

La blaugrana celebró su tanto en San Mamés, el tercero del Barça. Fuente: FCBFemeni

También cuenta con cinco goles y una asistencia en Champions League, y se encargó de cerrar el marcador poniendo el 0-3 en la última gran cita del equipo, de Copa de la Reina esta misma semana en la Catedral de San Mamés. Un nuevo estadio en el que Salma, esta pequeña gran revolución, pudo dejar su carta de presentación… el mismo escenario en el que quizá disputará la gran final europea el 25 de mayo.