Sus dos temporadas por el Camp Nou dejaron mucho que desear, y su experiencia en Alemania tampoco está cumpliendo las expectativas esperadas. De los 165M€ por su fichaje, al Barça le faltan 85M€ por amortizar, y tras la negativa del Bayern a pagar su cláusula, los culés tienen dos opciones: malvenderlo en Inglaterra-Italia, o acatar la voluntad de Setién de probarlo una temporada más.
A poco de cumplir sus 28 años, el brasileño lleva una temporada notable en cuanto a estadísticas: 9 goles y 8 asistencias en 31 partidos. Con la camiseta roja no ha terminado de tener esa continuidad que le hizo ser el jugador TOP que el Barça trajo de Liverpool, pues no ha sido titular indiscutible. Bajo las órdenes de Niko Kovac y Hans-Dieter Flick, los dos entrenadores que ha tenido este año, ha cumplido en ambas posiciones de extremo y de mediapunta, donde ha destacado más. Sin embargo, los bávaros esperaban un Coutinho más atrevido, más suelto para el regate, y más protagonista en la creación del juego, lo que ha decepcionado al club, que hasta hace poco pensaba en ejecutar la opción de compra no obligatoria.
En verano, Coutinho contará para Setién, y realizará la pretemporada vistiendo la azulgrana. El cántabro tendrá la oportunidad de valorar si cuenta con él para la próxima temporada, pero todo apunta a que sí, pues es un jugador del agrado del cuerpo técnico, que cree que estuvo desaprovechado en la etapa de Ernesto Valverde, donde no jugó en su posición. Esto haría un favor al club, que no tendría que ir al mercado a por un centrocampista y dejaría más capacidad económica para otros fichajes.