Supervivencia en la jungla

El Collao recibió al Barça B con todos los honores: césped sin cortar, agresividad al límite y una grada encendida desde el primer minuto. Una auténtica caldera en Alcoi a la que no acudió Álex Collado por unas molestias musculares, pero en la que el filial del Barça, el más joven de la historia, se metió de lleno.

Desde el inicio, el Alcoyano no tuvo ningún complejo en ir fuerte a los choques y mostrar un nivel de intensidad en las entradas tal vez demasiado al límite, pero el árbitro, presionado por la afición local, tampoco supo poner freno a las continuas faltas e insultos dentro y fuera del campo. La dureza del encuentro hizo achicarse al Barça B, que se mostró algo intimidado ante el escenario.

Los de García Pimienta prefirieron jugar en largo que moverse en espacios reducidos, y eso provocó un descontrol poco habitual en el encuentro que, sin duda, favorecía al Alcoyano. Mientras, los locales aprovechaban las jugadas a balón parado, punto flaco de los barceloneses, para intentar hacer daño. Iñaki Peña evitó males mayores con una agilidad y una seguridad bajo palos que lo acreditan a ser el sucesor de Ter Stegen en la portería del primer equipo.

El césped, alto y con baches, tampoco invitaba al juego de toque y salón al que están acostumbrados los de “Pimi”, pero hubo dos jugadores que entendieron a la perfección lo que demandaba el partido. Por un lado, Nico González dejó de lado su faceta como pasador para superar líneas en regate y conducción, protegiendo el balón con su cuerpo y haciendo progresar al equipo en base a ello.

A Nico lo acompañó en esta difícil empresa Konrad, que no necesita un gran juego en corto para marcar las diferencias. De hecho, un balón luchado entre Peque y el norteamericano a la media hora de partido terminó en un remate franco desde la derecha que el extremo cruzó perfecto para sacar al B de un apuro a la media hora de partido. No estaban cómodos sobre el campo, pero la ventaja estaba en el marcador.

La dureza local continuó tanto dentro como fuera del verde, pero el Barça B se sacudió algo la presión e intentó dominar el partido, algo que fue respondido con una agresividad desmesurada ante la pasividad del árbitro. La tónica fue la misma durante todo el partido, hasta que, en una segunda jugada a un cuarto de hora del final, Diakité puso un remate inapelable desde fuera del área a la escuadra de Peña. Parecía que el esfuerzo y los golpes sufridos por el Barça no tendrían resultado.

Sin embargo, Konrad de la Fuente todavía no había dicho la última palabra. Esta vez desde la banda izquierda, una conducción espectacular lo llevó a dejar atrás a tres rivales y colocarse en una situación de remate que el americano no desaprovechó. Potente disparo que José Juan no acertó a despejar y 1-2 que hacía justicia a lo visto en el campo.

La defensa blaugrana, junto con un enorme Iñaki Peña, abortaron los intentos a balón parado del Alcoyano de volver a anotar, y el Barça B sale vivo de uno de los campos más duros de 2ªB. A solo dos puntos de la clasificación matemática para los Playoffs, el sueño de los jóvenes está más cerca que nunca.