Recupera algo de confianza el Barça con una victoria relativamente sencilla ante el Celta. 4-1 con 3 goles de Messi a balón parado: dos de falta directa y uno de penalti. El Barça fue superior en todo momento a un Celta que todavía se está adaptando a las exigencias del nuevo entrenador. A continuación, las notas del encuentro:

Ter Stegen – 7’5. Poco pudo hacer el alemán en el gol de falta del Celta, y en la segunda mitad reaccionó a la perfección al poco peligro que generó el conjunto albiazul. Se reencuentra consigo mismo el portero después de un par de partidos flojos. Ter Stegen es justo lo que necesita el Barcelona en la portería.

Júnior Firpo – 6’5. Todo el mundo sabía que es un jugador más que válido para el lateral izquierdo del Barcelona y hoy ha aprovechado la oportunidad para demostrarlo. Ha dejado claro a Valverde que los experimentos en los laterales no valen la pena. Prácticamente en su primera subida por la banda, puso el centro que provocó la mano del penalti que sirvió a Messi para abrir el marcador.

Umtiti – 6. Era una incógnita el estado de forma del francés después de tanto tiempo sin competir, pero el poco trabajo que tuvo lo resolvió con solvencia, como solía hacer antes de la lesión. Con la vuelta del central se reabre el debate sobre la pareja de zagueros, aunque Lenglet ha acumulado bastante crédito en este tiempo para ser él quien forme en el once de gala.

Piqué – 6. No está siendo su mejor temporada, pero aun así mantiene un buen nivel en el centro de la defensa. Partido poco exigente para él hoy y, a pesar de algún despeje descuidado, correcto en líneas generales. Todavía se espera su mejor versión de cara a los momentos clave de la temporada.

Semedo –  5. Tuvo que salir a los 22 minutos de partido por unas molestias en el sóleo de la pierna izquierda. Durante el primer cuarto del encuentro que disputó tampoco intervino en exceso. Con el juego más centrado en la banda de Júnior, no tuvo muchas oportunidades de lucirse sobre el césped. Como detalle, se trata de las mismas molestias que sufrió Luis Suárez ante el Levante, pero en la pierna contraria.

Sergi Roberto – 6’5. Empezó el partido como mediocentro posicional, ocupando el lugar de Sergio Busquets. Apenas duró 20 minutos en esa demarcación, ya que la fuerte presión del Celta al inicio del encuentro mostró sus carencias en esa posición y obligó a Valverde a hacer cambiar el sitio a De Jong. Escasos momentos después, las molestias de Semedo lo devolvían al lateral derecho, movimiento que, aunque por desgracia fue obligado, benefició al juego del Barça.

De Jong – 7’5. Manejó el centro del campo en todo momento, sobre todo a partir del minuto 20. Junto con Arthur y Busquets mantuvo al Celta en su campo prácticamente todo el partido, contemporizando y moviendo el balón a la perfección. Además, añadió algún detalle y alguna de sus conducciones características a un partido muy completo del holandés.

Arthur – 7’5. De la mano en todo momento con Frenkie. Se entienden a la perfección y, con la seguridad de tener a Busquets detrás, hacen jugar al equipo a un gran nivel. Pases entre líneas, aguantar el balón de espalda a la espera de compañeros para jugar… Arthur puede hacer prácticamente de todo en el mediocampo y el Barça lo agradece.

Ansu Fati – 5. Poco participativo en general, y lo poco que intentó tanto en combinación como en acción individual no le salió bien. Se pierde poco a poco el impacto que causó al inicio de temporada, aunque de cara al futuro será una pieza fundamental en el equipo. Tiempo para él de seguir creciendo después de esta excitante experiencia con el primer equipo.

Griezmann – 4. Empieza a ser desesperante la situación del francés. No participa, no tira desmarques, no genera juego en ninguna de las tres posiciones del ataque culé. Los años con el Cholo lo hacen valioso en la recuperación tras pérdida y la ayuda en defensa, pero el Barça lo fichó para mucho más que eso. Si no mejora sus prestaciones, Dembélé le ganará el puesto.

Messi – 10. Enésima exhibición del argentino. Hat-trick en esta ocasión con dos magistrales goles de falta y un penalti en el que engañó a Rubén Blanco. Sigue haciendo historia Leo y demostrando cada partido que es el mejor jugador que ha visto, si no toda la historia, al menos el siglo XXI. Movió al equipo cuando peor lo estaba pasando y, sin un gran esfuerzo, decidió el encuentro.

 

 

Busquets (22’) – 8’5. El Barça cogió aire con su entrada en el campo, y poco a poco se adueñó del partido. Aunque fallón en algunos pases relativamente sencillos, dio salida en la transición ofensiva y fue, una vez más, grandioso en defensa. Además, se llevó un premio en forma de gol, el primero para él de esta temporada, con un zapatazo precioso desde la frontal del área tras un rechace.

Dembélé (45’) – 7. Sustituyó a Fati tras el descanso y el equipo lo notó. Como siempre se mostró atrevido, encarando constantemente a sus defensores y generando peligro. Un delantero tan móvil ayuda al juego de Messi y Suárez, de modo que si Griezmann no consigue adaptarse a la disposición del Barça, tal vez el mejor remedio sea contar con el “mosquito” en los partidos importantes. A escasos minutos de pisar el terreno de juego estuvo a punto de culminar una maravillosa jugada individual que habría reforzado esta posición.

Luis Suárez (72’) – 5’5. Volvió a tener minutos tras la leve lesión de la semana pasada. Aunque sin grandes ocasiones y desacertado en general, debe volver a coger el ritmo para estar al 100% cuando lleguen los enfrentamientos decisivos. Su conexión con Leo Messi es imprescindible en este FC Barcelona.

 

 

Valverde – 7. Fue, simplemente, lógico. Cuando vio que la decisión con Sergi Roberto en el “5” no daba resultado, intercambió su posición con Frenkie. Cuando vio que no era el día de Ansu, le dio confianza a Dembélé. Apostó por Júnior dándole el papel que se le presupone y quitó a Griezmann cuando vio su falta de respuesta. No hay mucho más que pedirle al Txingurri salvo lógica en sus decisiones. Debe empezar a recuperar crédito.