1X1 del Barça ante el Cádiz

Ter Stegen – 8,5: El Salvador. Si no llega a ser por él, el Barça se vuelve a Barcelona con tres puntos menos. Sigue ejerciendo de capitán sin brazalete. Ha sido nombrado el mejor del partido: cuando tu portero es el mejor, muy buen partido no has hecho.

Dest – 6: Tuvo que hacer de extremo todo el tiempo y a pierna cambiada. El único en proponer algo en el uno contra uno, pero casi siempre sin éxito. Aún le queda mucho por madurar en el juego.

Araujo – 7: El líder de la zaga. Domina ambas áreas y siempre suma cuando se incorpora al ataque. La salida de balón sigue siendo su punto más flaco, pero poco a poco parece ir mejorando la toma de decisiones cuando tiene que ser él quien comande el inicio de las jugadas.

Piqué – 6: Se dejó el alma. Mantuvo bien a Negredo y peleó con veteranía para que el Cádiz no ganase la ventaja de las prolongaciones en las transiciones. Fue clave en un corte arriesgadísimo a Soriano en la primera mitad. Tuvo energía para irse a la aventura en el añadido y cederle la oportunidad de gol a Memphis que podría haber dado los tres puntos al equipo.

Mingueza – 5,5: Cumplió sin más en ambas bandas. Bien defensivamente, pero sin presencia en ataque. No se incorporó en ningún momento del partido y tampoco aportó algo de amplitud al juego cuando los centrocampistas giraban de dirección. Con el balón en los pies debió arriesgar un poco más porque toda la ventaja que ganaron sus compañeros la desperdició con pases horizontales.

Gavi – 9: El mejor del partido. Fue sustituido injustamente y cuando más estaba creciendo en el partido. El único en interpretar bien en todo momento lo que necesitaba el equipo. Buscó asociarse por dentro con sus compañeros, tiró desmarques continuamente, no encontró la amplitud ni la profundidad que le permitiera brilla más y aún así era la única esperanza del equipo. Entregado al máximo sin balón y ejerciendo de líder echándose al equipo a la espalda con el balón en los pies. A sus diecisiete años, es el futuro, pero debe ser también el presente.

Busquets – 3: Otro mal partido del capitán al que el físico ya no le da para jugar noventa minutos todos los partidos. Fue clave en algunos robos de balón, pero ya no tiene la frescura que necesita a día de hoy el Barça en el pivote. Ha llegado el momento de que Sergio asuma otro rol: menos minutos.

De Jong – 4: Fue expulsado injustamente, pero tampoco brilló durante el partido. Tan solo se atrevió a buscar la profundidad en una ocasión durante la hora de partido que estuvo en el campo. Poco activo con y sin balón. No fue tan atrevido como de costumbre y tampoco se incorporó de manera efectiva al ataque. El Barça necesita mucho más de él y ha demostrado anteriormente ser capaz de aportar mucho más con y sin balón.

Demir – 4: Estuvo perdido en todo momento. Acorralado jugando más de interior derecho que de extremo. No tuvo casi oportunidades para poder darse la vuelta y encarar hacia portería. No aportó amplitud al estar alejado de la banda y no fue eficaz por dentro por la cantidad de jugadores que ocupaban los espacios por dentro. No recibió las indicaciones oportunas. Tiene potencial para mucho más.

Memphis – 6: Tuvo la victoria en sus botas en más de una ocasión. El referente en ataque peleando cada balón contra toda la defensa, pero totalmente desacertado de cara a puerta. Empezó la temporada en racha, con potencia y frescura, pero cada partido que pasa se le ve más cansado físicamente y su rendimiento ha bajado considerablemente. El Barça necesita mucha más efectividad por su parte.

Luuk de Jong – 3: Una vez más ha demostrado que no tiene nivel para el Barça. Ha pasado desapercibido durante todo el partido. Nulo en las descargas, lento en las transiciones, sin oportunidad de llegar a los balones en profundidad y desaparecido en el juego aéreo. Físicamente está muy por detrás del resto. No es jugador para el Barça.

Sergi Roberto – 4,5: Pecó de horizontalidad y buscó en exceso la pausa del partido. Tuvo opciones de encarar o buscar la profundidad por la banda derecha, pero no se atrevió en ninguna ocasión. Su mejor versión solo la puede dar en el medio, no es jugador de banda ni lateral. Cuando buscas a Sergi para obrar el milagro, mal vas.

Nico – 6,5: Junto a Gavi fueron las mejores noticias del partido para el Barça. Entró muy bien al partido sabiendo leer cuando combinar y cuando romper líneas en carrera. Siempre optó por orientar el juego hacia donde se podía potenciar más el ataque. Debe tener más minutos y relevar en más ocasiones a Busquets. Su cambio no debió ser por Gavi, sino por Busquets para que jugasen juntos Gavi y él.

Coutinho – 5: No entró mal al partido, pero gambeteó demasiado. Lo mejor que podía aportar era su disparo a puerta y solo lo intentó a balón parado. No dejó ninguna acción individual destacada salvo un centro peligroso al área chica. Este Coutinho tiene más opciones de salir que de ser importante en el Barça. O se enchufa pronto o los canteranos le pasarán por la derecha.

Riqui Puig – 5: Apenas tuvo un cuarto de hora. Entró impreciso, las ganas le podían, pero en los momentos tensos tuvo la pausa para elegir bien los pases. Se incorporó constantemente en ataque, pero no le encontraron. Le falta rigor táctico, darle más equilibrio al equipo en el medio. Es por eso que Gavi, a día de hoy, está por delante. Pero, no debería ser uno u otro, sino ambos. La mejor manera de que Riqui potencie sus virtudes y mejore sus defectos es teniendo minutos y continuidad.

Koeman – 1: Otro ridículo a su lista de logros. El equipo es un caos táctico. Sigue sin tener autocrítica y sin reconocer sus errores. No vio que el equipo necesitaba amplitud y en vez de corregir las posiciones de Memphis y Demir como extremos, cambió al segundo por Sergi Roberto. El equipo no juega a nada y depende en exceso de los destellos individuales de Memphis que, cuando falla como hoy, no puede salvarle del punto de mira. Quitó a Gavi cuando estaba siendo el mejor del partido para que entrase Nico en lugar de retirar a Busquets. Acabó siendo expulsado y se librará de sentarse en el banquillo del Camp Nou ante el Levante. Lo mejor que puede hacer por el Barça es irse.