El resultado del tan esperado Clásico ha sido un igualado 0-0. Respecto al nivel mostrado por parte de los culés en un partido tan exigente, las sensaciones son muy preocupantes para finalizar el año.
Ter Stegen (7): Varias paradas salvadoras hicieron al alemán mantener el marcador igualado ante el asedio blanco durante los primeros minutos. La presión alta del Madrid le obligó a ser más protagonista de lo habitual, teniendo que recurrir del pase en largo para comenzar muchas de las jugadas.
Semedo (4): El portugués era la novedad en el lateral por delante de Sergi Roberto. Sin la velocidad de Vinicius, Semedo tenía que intentar frenar las incorporaciones de Mendy, en las que por momentos se vio superado. Nada cómodo y sin buscar espacios, con el evidente bajón físico de la lesión que le lastró el último mes.
Piqué (5’5): Siempre protagonista en los duelos directos frente al eterno rival. Hoy, sin embargo, no lo fue. Mantuvo una lucha particular con Benzema, y perdió la posición en muchas. Siendo el central clave para sacar el balón, no dio soluciones ni a Ter Stegen ni a De Jong, los apoyos en esas transiciones rápidas. La ausencia de Busquets se le notó.
Lenglet (6): Correcto como de costumbre, pero llegando tarde a ciertos balones, y dejando mucho espacio entre la línea defensiva y la del medio. La falta de concentración fue aprovechada por jugadores como Fede Valverde, que tuvo ocasiones claras de gol desde fuera del área.
Jordi Alba (5): El mejor socio de Messi no terminó de carburar. El argentino le sirvió en bandeja dos balones que no fue capaz de materializar. En aspectos defensivos, muy superado por la presión, y sin opciones de buscar espacios por la falta de posesión del equipo.
Ivan Rakitic (3): El croata era la novedad tras la baja de última hora de Busquets, y mostró un nivel muy pobre en comparación a lo mostrado en los últimos partidos. No acompañó a Frenkie en la salida de balón y ejercía una presión inexplicable.
Frenkie De Jong (6’5): Indispensable en el esquema hasta cuando el equipo juega mal. El hecho de pasar más tiempo defendiendo que atacando opacó sus facetas, pero mantuvo el equilibrio del equipo en algunos minutos y fue de los pocos que intentó algo diferente. Estuvo solo en el centro del campo.
Sergi Roberto (4): Pasó inadvertido por el medio, donde sigue sin mostrar sus cualidades. De lateral estaba cumpliendo en los últimos partidos y así termino el Clásico.
Luis Suárez (3): Expectantes ante su buena racha en los partidos contra el Madrid, el uruguayo no destacó ni por su garra, ni por su agresividad, ni por sus ocasiones. Erró varias veces en el pase y en las decisiones de apostar por jugar en solitario.
Griezmann (3): Más integrado en el tridente, pero aún carente de maldad. Destacó más por sus repliegues defensivos que por sus desbordes o arrancadas. El francés, que también era un verdugo del Madrid, anduvo desaparecido.
Leo Messi (6’5): Con un tremendo pase en diagonal hacia Jordi Alba parecía comenzar el espectáculo. Se apagó cuando veía imposible salir con el balón jugado, y se vio superado con la presión continua de Casemiro y Valverde en cuanto interactuaba con el balón. No era el día del argentino, incluso falló un chut a puerta vacía, inexplicable en él.
Arturo Vidal (4): La segunda parte estaba descontrolada y Ernesto Valverde decidió darle entrada para calmar el ritmo de partido. Sin embargo, no produjo efecto alguno su cambio, y aunque no dejó de presionar, tampoco encontró forma de sumarse al ataque como sí hace en otras ocasiones.
Ansu Fati (5): Con 17 años se ha convertido en el jugador más joven en disputar un Clásico. Quizás le faltaron minutos para haber aprovechado su oportunidad, pues poco pudo hacer con la presencia de Carvajal encima. Con espacios hubiera sido letal, pero ningún equipo quería arriesgar en el tramo final del encuentro.
Ernesto Valverde (1): El ‘Txingurri’ volvió a las andadas. Su planteamiento nefasto reflejó que Zidane saliera ganador de la batalla táctica que se plasmó sobre el terreno de juego. Incapaz de dar solución a la presión asfixiante del Real Madrid, erróneo posicionando a Sergi Roberto en el centro y lento en los cambios que pudieron marcar el rumbo del partido. Este Clásico le vuelve a dejar con la soga al cuello para terminar un año de pesadilla.