Se puede decir que el Barça está volviendo a apostar por los mejores centrocampistas para su estilo. Después de varios años de transición y en mitad del revuelo institucional, se escuchan opiniones de emblemas que engrandecieron al club azulgrana como capitanes y profesionales. Xavi ha pasado a un segundo plano tras el anuncio de Quique Setién, pero ahora es Andrés Iniesta el que habla. Tras finalizar la temporada en Japón consiguiendo su primer título con el Vissel Kobe, el manchego disfruta plácidamente sus vacaciones en Barcelona y Fuentealbilla.
Sin parar ni un segundo aun estando de descanso, Don Andrés cumple con la prensa nacional, y es que nunca tiene un ‘no’ por respuesta para analizar los temas del que hasta hace dos años fuera su club. Este lunes se pasó por ‘El Larguero’ y charló con Manu Carreño después de una semana histórica para los barcelonistas. Todo comenzó con la visita a la Ciudat Esportiva Joan Gamper para saludar a sus excompañeros y entrenador: “No fue el mejor día para ir por todo lo que se había comentado y por lo que podía pasar. Siempre es una alegría verlos. Por lo que hablé y todo el mundo intuía, no fue un día cómodo para nadie”. Respecto a la nueva incorporación en los banquillos, también dedicó unas palabras de alabo por su experiencia personal: “Setién me parece un entrenador preparado y capacitado, por lo que conozco, lo que he visto y he podido escuchar de su boca, y sobre todo viendo cómo han funcionado sus equipos creo que puede hacer las cosas muy bien”.
Sobre Ernesto Valverde también se mojó, y es que la tensión que se transmitía en el aire no era buena para ninguna de las partes: “No sé si hubiera mantenido a Valverde hasta final de temporada, creo que las decisiones así nunca son fáciles. Es fundamental que el estilo no se pierda, y el míster que ha llegado tiene esa idea muy interiorizada. Ojalá todo encaje para que a final de temporada se pueda optar a todos los títulos”.
Su futuro también sigue siendo incierto, pues Andrés no tiene claro si seguir vinculado al fútbol a pie de campo o fuera de él. De momento, deja un mensaje de ilusión para los que siempre soñaron verle desde la banda: «Estoy con una mira puesta en ser entrenador, aunque me quedan dos años más de contrato y si tengo fuerza, seguiré. A día de hoy esa ilusión y motivación que tengo por jugar sigue existiendo. No sé, pero en Japón estamos muy bien y por lo tanto si no pasa nada tendría que ser ahí».
Su amigo Xavi ya ha comenzado su carrera como técnico, y de momento no le ha ido mal con el Al Saad, consiguiendo dos títulos en su primera temporada. A los culés les interesa saber la decisión de ambos de aquí a unos años, y según lo que dictan, parece que puede hacerse real ese posible dúo de cerebros en el banquillo azulgrana: «Todos los entrenadores quieren que sus equipos se identifiquen con su forma de ver el fútbol. Con Xavi voy hablando a menudo. No era fácil decir que sí y decir que no también. Algún día acabará en el Barça, cuando una persona está capacitada es importante que vuelva al club. ¿Un tándem Xavi-Iniesta? Sonar suena muy bien«.
Parece que Andrés tiene muy clara su idea de seguir haciendo lo que más le gusta, aunque sea desde la banda. Y es que… ¿a quién no le gustaría verle dando órdenes a Frenkie De Jong, Arthur o Riqui Puig?