El FC Barcelona sufre ante el Intercity para pasar a octavos, en un partido loco. Ansu Fati en la prórroga transformó el gol del triunfo, después de que el equipo alicantino remontara hasta tres veces los goles de Araújo, Dembélé y Raphinha.

El FC Barcelona se estrenaba en la copa del rey, ante un Intercity que se encontraba ante el partido más importante de su corta historia. Con tan solo 6 años de vida, el único club del panorama español que cotiza en bolsa vería como recaudaba más de un millón de euros sólo en ticketing. Sin embargo, el Rico Pérez, que sería el improvisado escenario del espectáculo, luciría mayoritariamente camisetas azulgranas.

    Estadio José Rico Pérez en la previa del partido (Photo by Mateo Villalba/Quality Sport Images/Getty Images)

Por su parte, los de Xavi no contaban con Pedri y Lewandowski, que descansaban en Barcelona. Como era de esperar, el once inicial llegaría repleto de sorpresas. Lo formarían Iñaki Peña, Héctor Bellerín, Koundé, Araújo, Jordi Alba, Pablo Torre, Busquets, Kessie, Dembélé, Memphis Depay y Ferrán Torres. La alineación suponía minutos de rodaje para Araújo y Koundé, una oportunidad de oro para Pablo Torre, una reválida para Memphis y minutos para que Ferran se adapte a su nueva posición.

Por parte del Intercity, el técnico Gustavo Siviero formó con Gaizka Campos, Guillem Jaime, Vadik, Álvaro Pérez, Gálvez, Cristo Romero; Miguel Marí, Aarón Piñán, Bellotti, Oriol Soldevilla y Pol Roigé. Para el equipo no sólo era una gran oportunidad económica y deportiva, sino un encuentro especial para muchos de sus futbolistas: más de ocho de ellos fueron algún día canteranos del FC Barcelona.

Comenzaba el partido con un Intercity muy corto, cerrando espacios por dentro y dejando conducir a los centrales blaugranas. Sin embargo, el primer golpe duro para los de Siviero no tardaría en llegar: en el minuto 3, Araújo adelantaba a balón parado a los suyos, tras una gran asistencia de córner de Pablo Torre.

    Araújo en el gol (Photo by Mateo Villalba/Quality Sport Images/Getty Images)

Pero Araújo volvería a ser protagonista en el partido tan solo 15 minutos más tarde. Aarón conducía un contragolpe de forma espectacular, hasta plantarse sólo delante de Iñaki Peña. Sin embargo, el uruguayo, en una gran acción defensiva, sacó el balón de debajo de los palos para mantener el 0-1 en el marcador.

Pasaban los minutos y el Barcelona seguía dominando el partido. Mientras Ferran y Memphis no conseguían impactar en el mismo como se esperaba de ellos, Pablo Torre crecía en el encuentro. Se movía tal y como pedía la acción, estirando al espacio o ofreciéndose. La primera parte terminaba y los culés marchaban al vestuario satisfechos. Sin embargo, desconocían el infierno que les esperaba a tan solo 15 minutos de distancia.

La segunda parte comenzaría algo más descontrolada. El Intercity se acercaba con cierto peligro a la portería de Iñaki Peña, tras modificar el sistema y quitar un central. Mientras, Xavi también hacía un retoque táctico: Memphis ocuparía la zona del ‘9’, mientras que Ferran se desplazaba a la banda izquierda.

En el minuto 58, el Intercity devolvería el golpe al Barcelona, con la misma arma que utilizaron los culés en la primera mitad: el balón parado. En un córner, Soldevila empataba el partido, tras un rechace. La reacción de Xavi sería inmediata: Ferran, Araújo y Pablo Torre abandonarían el campo para dar entrada a Raphinha, Eric y Gavi. Una vez más, parecía que al Barça se le complicaba la clasificación, pese a la poca entidad del rival.

    El Intercity empata el partido(Photo by Mateo Villalba/Quality Sport Images/Getty Images

Pero Dembélé en el 66 decidió que el partido no iba a correr esa suerte, al menos durante unos minutos. Tras una gran conducción, definió de picada ante la salida del portero rival para volver a adelantar a los suyos en el marcador. Sin embargo, el 2-2 no tardaría en llegar: Soldevila, por segunda vez, anotaría de cabeza después de un gran centro lateral. Ansu entraba por Memphis y el Barça se volcaba al ataque: tan solo quedaban 15 minutos de tiempo reglamentario.

El partido seguía completamente loco. Pocos minutos después del 2-2, Raphinha volvía a decantar el partido para los culés, después de una gran jugada colectiva. El impacto de Ansu en el partido fue muy positivo y la banda izquierda del Barça, con Dembélé y sus caídas, se volvieron el principal foco de peligro culé.

Pero en el 85, un error grave del recién ingresado Marcos Alonso propiciaba un contraataque para el Intercity que terminaría con el 3-3 en el marcador. Oriol Soldevila anotaba su hat-trick y ponía de nuevo patas arriba la eliminatoria: con tan solo 5 minutos por delante, se vislumbraba la prórroga.

    Ansu con Raphinha en el gol final (Photo by Mateo Villalba/Quality Sport Images/Getty Images)

Y así fue. Las tres remontadas consecutivas de los hombres de Siviero obligaban a los de Xavi a un esfuerzo extra si querían superar la eliminatoria. Y antes de que llegara la prórroga, Ansu adelantaba a su equipo por cuarta vez en el partido y dejaba a los suyos a las puertas de la clasificación. Quedaba la segunda parte de la prórroga. Sin embargo, a través de posesiones largas, el Barcelona consiguió domar un partido absolutamente loco y, así, hacerse con la clasificación.