Inicio de año soñado del Barça de Xavi Hernández. El equipo está en su mejor momento de resultados y juego desde la llegada del egarense al banquillo: Líder en Liga, a tres puntos del Madrid, clasificado para las semifinales de Copa y con el primer título de la temporada en el bolsillo.
La victoria en la Supercopa, por el hecho y sobre todo por el cómo, parece haber dado la inyección de motivación y confianza que necesitaba el equipo. A pesar de no terminar de ganar cómodamente, la convicción es cada vez mayor, tanto por la actitud de los jugadores en el campo como por las decisiones que se toman desde el banquillo.
El sistema de los cuatro centrocampistas provoca la explosión del binomio Pedri – Gavi, además de una versión rejuvenecida de Sergio Busquets, que ha encontrado en Frenkie De Jong a su mejor escudero de los últimos tiempos. Sobre este planteamiento, habló Xavi hace unos días: “Con esta idea creamos superioridad y ellos tienen la calidad para buscarse y para encontrar el hombre libre”. De Busquets sentenció que “lo que le beneficia es que el equipo esté junto; si hay mucho espacio le cuesta más que al resto. Tenemos que intentar que el bloque esté junto, entonces es el mejor del mundo en su posición”. De momento, le está dando frutos y se ha convertido en la apuesta para las últimas grandes citas.
Insistiendo en Sergio Busquets, ha vuelto a demostrar que, en un contexto favorable, tiene cuerda para rato. En la final de la Supercopa fue determinante en dos de los tres goles del Barça; robando el balón a Camavinga en el gol de Gavi, y filtrando por dentro para Frenkie en el tanto de Lewandowski. Ante la Real Sociedad, otra exhibición: 9 recuperaciones y una efectividad del 94% en pases (103/110). Nada es casual, jugar arropado le abre un abanico de posibilidades en cada jugada, después decidiendo casi nunca falla, y en esto sigue siendo el mejor. Es comprensible que, teniendo en cuenta la poca fortaleza económica del club para fichar, Xavi piense en renovarle una temporada más. En el ejercicio de la presión tras pérdida para someter al rival en campo contrario, sigue siendo un máster.
Xavi ha dado en la tecla con los cuatro centrocampistas, encontrando la mejor versión de su equipo, que además goza de una gran solidez defensiva y de una versión superlativa de Ter Stegen. Con un poco más de contundencia en ataque, se puede ser muy optimista de cara al segundo tramo de temporada, por lo menos en las competiciones nacionales.