Victoria revitalizante de un Barça que sigue invicto en 2021 y por fin encuentra las sensaciones que necesitaba para encarar la parte más importante de la temporada. Dominó, también con el marcador a favor, y consiguió controlar el partido con la pelota. 0-4 y una dosis de confianza que viene al pelo a los de Koeman para enfrentar la Supercopa de España durante la próxima semana. A continuación, las notas:

 

Ter Stegen – 8. Serio como siempre. Sacó al inicio del partido un disparo complicadísimo de Puertas que podría haber complicado mucho el partido. Superó algunos problemas de concentración al inicio de la Liga y ahora está a un nivel formidable. Es el mejor portero del mundo para ocupar el “1” del Barça.

Sergiño Dest (81’) – 6’5. Debe mejorar en alguna toma de decisiones, sobre todo cuando juega con Dembélé delante, ya que el francés necesita un espacio que Dest no siempre acierta a facilitarle. Aun así, es un proyecto ilusionante de lateral derecho que crecerá hasta donde se lo proponga.

Mingueza – 7’5. Jugó como si fuesen dos, ya que Umtiti necesita un compañero que cubra los sitios donde él no es capaz de llegar. Partido muy serio del de Santa Perpètua, que ejerció de líder de la zaga y sacó siempre con criterio el balón desde atrás. Es un gran jugador para este club.

Umtiti (71’) – 6’5. Entró en el once inicial a última hora debido a las molestias de Ronald Araujo en el calentamiento. Le costó entrar en el encuentro, pero una vez asentado y concentrado cubrió la papeleta. El gran despliegue de Mingueza le ayudó a apagar los fuegos donde no llegaba, pero cuajó un buen partido en líneas generales.

Jordi Alba (71’) – 6’5. No destacó en exceso, ya que la construcción del juego se centró en la banda derecha con Dembélé actuando por allá. Aun así, siempre tiene dos o tres llegadas clave que pueden romper el partido. Tuvo un disparo claro que envió fuera de la escuadra por unos pocos centímetros. Se asoció más con sus compañeros cuando Messi fue sustituido.

Busquets – 7. Se está volviendo a encontrar a sí mismo a base de estar solo en el doble pivote. Vuelve a organizar al equipo, vuelve a saltar de forma precisa a la presión tras pérdida y, en definitiva, vuelve a capitanear el juego de posición y la salida de balón del equipo. Necesita dosificarse, pero el 4-3-3 le da una vida nueva.

De Jong (65’) – 8. Se está empezando a parecer al que el Barça esperaba cuando lo fichó. Llega al área, presiona, toca, defiende… La libertad que le da Koeman en el medio campo hace que se multiplique. Si continúa en esta progresión será una auténtica bendición para el Barça.

Pedri (73’) – 7’5. No fue tan determinante como en los últimos partidos, pero se le sigue cayendo el talento de los bolsillos. Tuvo un descanso merecido para estar a tope el miércoles. Su capacidad de asociación y visión de juego son lo más parecido a Andrés Iniesta que se recuerda en el club. Genera una ilusión acaparadora.

Messi (65’) – 9. Vuelve a ser Lionel Messi. Su doblete de hoy lo coloca como pichichi de Primera División con 11 tantos, volvió a anotar un libre directo después de 69 intentos y anotó un golazo por la escuadra a pase de Antoine Griezmann. Con él al mando del equipo se puede competir por todo. Tuvo tiempo hasta para descansar, al ser sustituido por Martin Braithwaite.

Dembélé (73’) – 8. Abrió el campo, encaró, y volvió a hacer justo lo que el equipo necesita. A buen nivel, es un jugador imprescindible para el Barça. Picó un balón buenísimo que Griezmann convirtió en el 0-4. El francés es, ahora mismo, indiscutible en el XI de Ronald Koeman, y por eso fue sustituido para recuperar a tiempo del inicio de la Supercopa.

Griezmann – 9. Si aparece Antoine, el equipo puede dar un vuelco tremendo. Con Messi de falso 9 y yendo muy abajo, parece que ha tocado la tecla adecuada para que el francés pueda jugar por dentro en la punta sin pisarse con el argentino. Con Dembélé al otro lado tiene espacio de sobra para maniobrar en la punta, y eso se ha visto reflejado en dos grandes goles ante el Granada.

 

Braithwaite (65’) – 5’5. Entró para dar descanso al “10” y lo intentó como siempre, con intensidad y estirando al equipo a base de desmarques. Sin embargo, no acertó a rematar a puerta ningún centro de los que le facilitaron sus compañeros.

Pjanic (65’) – 6. Entró para dar descanso a Frenkie de Jong y cumplió sin más. Bien el bosnio, que es el primer recambio para el mediocampo. Jugador número 12 de mucha calidad para el Barça. Se echa de menos alguno de sus tantos característicos con un disparo desde fuera o a balón parado.

Riqui Puig (73’) – 7. Cada vez que tiene minutos se hace más incomprensible entender por qué Koeman no lo quiere. Tiene una calidad infinita, controla el juego a placer y juega a dos toques con una facilidad pasmosa. Su visión de juego es algo fuera de lo común, y compensa su falta de físico con una colocación impecable. Se le debe exigir a Koeman que le dé las oportunidades que merece el de Matadepera.

Trincao (73’) – 6. Tuvo otra oportunidad después de haber sido desterrado los últimos encuentros, y sigue sin generar lo que se le pide. Parecía que debería disputarle el puesto a Dembélé, pero actualmente el francés está muy por encima. Necesita un partido con buenas sensaciones para volver a coger confianza.

Júnior (81’) – 5’5. Sustituyó a Dest, que sintió unas leves molestias, y se desempeñó en el lateral derecho. Su polivalencia puede salvarle un sitio en el equipo, aunque su nombre figura en la lista negra de Ronald Koeman. Veremos si tiene una última oportunidad o se materializa su salida.

 

Koeman – 8. Por fin se muestra coherente en los cambios. Dio minutos a Trincao y Riqui Puig cuando el partido estaba decidido, dio descanso a algunos titulares que habían acumulado muchos minutos e incluso acordó con Leo Messi que este descansara la última media hora. El 4-3-3 se asienta y el equipo empieza a carburar. Por fin el neerlandés entra en razón.

 

Griezmann celebra con el equipo uno de sus dos tantos | Getty Images