El Barcelona ya no depende de sí mismo para estar en la siguiente ronda de la Champions League. Una espectacular bienvenida por parte del jugador 12, la afición, daba a entender la vital trascendencia del encuentro. Sin embargo, ni la concentración ni la eficacia han estado del lado de los azulgrana. Errores groseros en transiciones defensivas han condenado a un Barça que se le resisten las grandes citas europeas.

7. Marc-André Ter Stegen: Con decir su nombre en Twitter muchas veces se deduce su impacto en los partidos. Vital bajo palos ha evitado que la herida neroazzurri fuese mucho más profunda de lo que podría haber sido. El guardameta alemán parece haber recuperado su mejor nivel, ahora falta que le acompañen sus compañeros defensivamente.

1. Gerard Piqué: En transiciones ha sido de los que más ha sufrido junto a Marcos Alonso. El central catalán no ha tenido la contundencia, ni la concentración requerida en un partido tan clave como el de esta noche. Mal posicionado y sin control sobre su espalda, Barella ha podido entrar con total libertad y marcar el gol del empate. El gol de la condena y del desacierto para lo que vendría después.

6. Eric García: Ha sido el mejor de toda la defensa, pese a tener algunos errores y falta de contundencia en el área. No es novedad los grandes partidos que encadena el de Martorell, constante e importante con balón.

6. Sergi Roberto: A más de uno le ha sorprendido su vuelta tras lesión. Ha aportado al equipo incorporándose como ese cuarto centrocampista que ha querido meter Xavi para ser superiores en la medular y tener más posesión. Su papel esta vez ha sido más ofensivo que defensivo y ha sumado positivamente.

3. Marcos Alonso: Venía siendo el lateral izquierdo escogido en los partidos de Champions y hoy ha repetido en el once. El sistema planteaba riesgos defensivos que se debían asumir, pero no se esperaba que fuera a ser el desastre que ha acabado siendo en transiciones del Inter. No ha estado bien en el marcaje ni tampoco posicionalmente. No ha sido su día.

4. Sergio Busquets: Si el equipo no está bien, tampoco lo suele estar él. Pese hacer una buena primera parte, ha sufrido mucho: corriendo a sus espaldas sin llegar y con pérdidas que cuestan goles. Por el control del centro del campo pasaba el partido, pero con las prisas y el descontrol se fue todo al traste.

6. Pedri: Partido tras partido es el más importante de la sala de máquinas. Detalles de calidad, recuperaciones y algunas intentonas con pases y centros a sus compañeros sin la eficacia y suerte de otras veces.

6. Gavi: Su entrega y lucha que no queden en vano. Da la vida por recuperar balones que parecen imposibles por sus condiciones físicas. Ha ido intercambiando el lado del interior con Pedri y se ha incorporado al ataque en ocasiones como mediapunta en la frontal.

5. Ousmane Dembélé: Últimamente, no le salen las cosas. La toma de decisiones sigue sin ser lo suyo y es algo que le condena más en lo negativo que en lo positivo. Su gol, que parecía desatascador, pasaba al olvido. Un pase que dejaba solo a Ansu se quedaba en el aire con un quiebro innecesario.

6. Raphinha: Lleva partidos sin estar del todo acertado. Sin bailar como lo hacía en los primeros partidos. Desaprovechó una gran ocasión en la primera parte, que compensaría con el pase que nadie veía en la acción del primer gol. Cuesta entender que sin hacerlo mal del todo su cambio sea el primero antes que el del extremo francés, más caótico y desafortunado.

7,5. Robert Lewandowski: Parecía que se iba a ir de vacío y, en ese instante, aparecía. Es el jugador que más genera en la línea atacante, sus goles son el reflejo y un alivio. Goles que dan vida o agonía, en función de cómo se mire, por alargar una situación muy complicada en esta travesía por la ingrata Europa.

6,5. Alejandro Balde: Su entrada ha dado oxígeno al equipo. Combinando con sus compañeros y sumándose al ataque como referencia profunda en el carril izquierdo. Su rapidez y buenos minutos le postulan como la opción más viable en ese lateral.

5. Ansu Fati: No acaba de encontrar ese guiño que le permita demostrar su potencial y confianza que tenía antes de su lesión. Lo intenta, pero por ahora sin la suerte que anda buscando.

5. Franck Kessié: En un contexto como el partido de hoy, de haber entrado antes, hubiera dado algo más de músculo y oxígeno en el centro del campo. Lo poco que ha entrado ha utilizado bien su cuerpo para recuperar balones y combinar con sus compañeros.

5’5. Frenkie de Jong: El neerlandés, que parecía que iba a entrar de inicio, ha entrado para los últimos 30 minutos sin gran repercusión. Acertado en los pases e incorporándose en ataque.

5. Ferran Torres: ha entrado en los últimos compases para intentar generar espacios y con la meta del gol sin prácticamente oportunidades. Su aportación ha sido bastante intrascendente por los pocos minutos disputados.

4. Xavi Hernández, el míster: Agregar a Sergi Roberto como cuarto centrocampista en ataque era una buena idea para acumular potencial en la medular y controlar la posesión. En la segunda parte, el equipo sufriría en transiciones y los goles llegaban. Era un riesgo que parecía que había que asumir, faltó una reacción más temprana en los cambios para estabilizar la situación, buscar soluciones y no olvidar la importancia de defender para poder atacar. Con el equipo volcado en ataque, el descontrol posicional era irreversible.

10. El jugador 12, el público: El recibimiento en la previa al partido ha sido algo espectacular. Con ambiente de día grande, todo se ha quedado en un sueño convertido en pesadilla. El equipo no ha podido estar a la altura de un Camp Nou a rebosar y con la esperanza de dar una imagen decente por el precedente de los últimos partidos.

¿Y ahora qué? Se preguntan muchos aficionados. Seguir apoyando para revertir la situación, no queda otra. Esto deja algo claro que es importante no olvidar la humildad y el trabajo. Dejar de lado la euforia de los primeros partidos y ser realistas viendo de dónde viene este equipo. Seguir remando a contracorriente, para cuando las aguas vengan a favor.