Las rodalías del Spotify Camp Nou colapsadas y rías de gente intentando entrar al estadio hacían pensar que se trataba de otra tarde especial. Histórica. El Barça volvía al templo para disputar una nueva eliminatoria de Champions. La vuelta de los cuartos de final ante la Roma, en un Camp Nou que no se llenó hasta bien empezada la primera parte, pero cuando lo hizo, 54.667 voces hicieron temblar el suelo. La tercera máxima entrada de la historia de la Champions. Todas blaugranas.

El Barça supo conducir el partido hacia su plan. Jonatan Giráldez repitió el once de la ida, y esta vez cuajó a sus rivales en su propio campo. El marcador se abrió tras un centro que puso Salma, Oshoala descargó de cara como si de una boya de waterpolo se tratara, y Rolfö fusiló a bocajarro con la derecha. 10 minutos y el plan cobraba forma.

Más aún cuando pasado el ecuador del primer tiempo, Mapi dibujaba un zurdazo hacia la escuadra desde 30 metros. La central le está pillando gusto a esto de marcar golazos en el Camp Nou. Antes de recibir el balón ya estaba deseando golpear desde esa posición, comentaba en zona mixta.

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Mapi siendo felicitada por sus compañeras después de su gran gol. FUENTE: Getty

Antes del descanso cayó el tercero, obra también de Fridolina Rolfö. La sueca – que se llevó el MVP del partido – remató a placer un centro bajo con efecto delicioso de Hansen, después que ésta recogiera una apertura de Aitana. 3 a 0 en el descanso y el Barça que ya tenía la eliminatoria sentenciada.

En el descanso, el técnico de la Roma, Alessandro Spugna, sustituyó a una Vicky Losada que debutaba en el Camp Nou. Un partido en el que pasó inadvertida, pero que le sirvió para cumplir su sueño como culé.

La segunda parte fue una fiesta para el público blaugrana desplazado al estadio. Olas humanas, luces de móviles y el inconfundible “Un Dia de Partit” acompañaron en todo momento a las jugadoras del Barça.

Ellas también pusieron de su parte cuando, en la primera acción de peligro de este periodo, pusieron el cuarto. Irene Paredes vió el desmarque en largo de Aitana, que ganó la línea de fondo y puso un centro raso para que Oshoala introdujera el balón en las mallas. La nigeriana se puso el público al bolsillo celebrandolo con rabia.

La manita llegó poco después, tras un córner que botó Hansen y remató Patri en el primer palo. La mallorquina fue la más lista de la clase y se adelantó a todo el mundo. Era el su primer gol en el Camp Nou, pese a haber participado en todos los encuentros anteriores.

Annamaria Serturini amargó un pelín la tarde del Camp Nou con un gol en medio del festival blaugrana. Nada más lejos de la realidad, se trató de un gol de honor para una Roma que salió ovacionada por la afición culé al final del partido.

Durante los compases finales tuvieron minutos Bruna, Geyse, Engen, Núria y Jana, que de esta manera debutaba en el Camp Nou. Cumplía un sueño que tenia desde pequeña, y se llevó la ovación de una afición entregada que coreó su nombre. Giráldez en rueda de prensa también la elogió.

El pitido final no supuso el fin de la fiesta, pues las jugadoras se quedaron celebrando con el gol norte como ya viene siendo habitual en estos escenarios. Afición y equipo unidos en sintonía bajo un mismo arrebato. Hasta el adiós de las protagonistas por el túnel de vestuarios tampoco suponía un final de este festival europeo. La próxima parada son las semifinales, y el Camp Nou espera ansioso otra noche mágica.