Quién le hubiera dicho a Jordi Alba hace una temporada que su rol en el Barça de Xavi iba a dar semejante giro de 180 grados. El 2022 fue lo más parecido a una montaña rusa para el lateral de L’Hospitalet; de ser titular indiscutible y cosechar una buena actuación durante la peor temporada del Barça de los últimos veinte años a apenas asomar la cabeza desde el banquillo durante la presente campaña.
La situación de Jordi Alba ha sido uno de los temas más calientes del pasado verano. Desde la pretemporada, Alejandro Balde, quién apenas disfrutó de minutos durante la temporada pasada, adelantó por la izquierda al lateral hospitalense. De hecho, durante las últimas horas del mercado de fichajes, muchas eran las fuentes que apuntaban a una salida del tercer capitán de la plantilla rumbo al Inter de Milán.
Sin embargo, mudarse a Italia no entraba en los planes de Jordi Alba que, pese a ser consciente de que la competencia por el carril izquierdo era la más fuerte de los últimos años, quería seguir siendo importante para Xavi. Finalmente, tras una conversación con el técnico egarense sobre sus nuevas funciones dentro de la plantilla, en la que se hizo alusión a la misma situación por la que también estaba pasando Gerard Piqué -otro de los capitanes-, Jordi Alba decidió quedarse.
Una decisión muy madura del capitán hospitalense que, pese a que al principio de la temporada las cámaras captaron su disconformidad con sus continuadas suplencias cada vez que bostezaba o bromeaba con Piqué en el banquillo, ha sabido asumir su nuevo rol dentro del vestuario.
Ha pasado de jugar 30 partidos -todos como titular- la campaña anterior a disputar 16 de 42 encuentros posibles esta temporada, de los cuales solo seis han sido partiendo desde el once inicial. No obstante, pese a llevar poco más de un tercio de la mitad de los minutos que disfrutó el curso anterior, sus cifras siguen siendo buenas desde el banquillo: 1 gol y tres asistencias (quinto máximo asistente del equipo en Liga).
Sin embargo, su función actual en el equipo va más allá de las estadísticas. Sus compañeros lo ven como el veterano que cualquier vestuario necesita para integrar a los más jóvenes y hacer piña con una plantilla que, tras varios años de momentos difíciles a nivel deportivo y personal, necesita estar más unida que nunca. Eso sí, un perfil como el suyo se ha echado de menos dentro del terreno de juego en algunos momentos de la temporada en los que el equipo no ha estado a la altura.
Durante la rueda de prensa previa al partido contra el Elche, Xavi ha reconocido que la figura de Jordi Alba puede volver a ser relevante durante este tramo de la temporada, La carga de minutos de Balde y los siete partidos que se vienen durante este mes de abril obligarán a Xavi a hacer rotaciones. Es el momento perfecto para que la ‘Bala de L’Hospitalet’ vuelva a ponerse el brazalete, ejerza como capitán sobre el verde y aporte su grano de arena en forma de experiencia y madurez.
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