Mucho se habla del Madrid de Zidane pero este Barça sigue sin funcionar. El equipo azulgrana culmina la quinta jornada de Liga con una nueva derrota, que lo deja provisionalmente en la séptima posición de la tabla habiendo conseguido tan solo siete puntos en cinco partidos.

El encuentro frente al Granada no podía empezar con peor pie, y es que nada más comenzar el juego, Azeed sería el encargado de aprovechar un gravísimo error de Junior Firpo (quien debutaba en la titularidad con el Fútbol Club Barcelona) para adelantar al Granada en el marcador.

Fuente: Miguel Morenatti

Ante este jarro de agua fría, lejos de reaccionar, el Barcelona no realizó ningún disparo a portería en la primera parte, dejando atrás unos primeros cuarenta y cinco minutos para el olvido. Por su parte, el equipo local no se amedrentaba ante el vigente campeón de Liga, y continuaba aprovechando sus ocasiones y plantándole cara al encuentro.

En la segunda mitad, Valverde incorporó al terreno de juego a Leo Messi y Ansu Fati, que si bien intentaron revolucionar un poco el partido, no consiguieron que el Barça terminara de despertar y fuera capaz de meter el balón en la portería.

Fuente: Getty Images.

Llamativa fue a su vez la ausencia absoluta de Suárez y Griezmann en el encuentro, totalmente desaparecidos en el ataque. Una vez más, pudimos ver como el francés no funciona como extremo, al igual que tampoco lo hace Sergi Roberto en el medio del campo.

El tercer cambio del Barcelona llegó con Arturo Vidal, quien propiciaría el segundo y último gol del Granada tras tocar el balón con la mano dentro del área rival, siendo Vadillo en encargado de batir al portero alemán del Barça.

Al finalizar el partido, los jugadores del Granada celebraban la victoria como si de una conquista de la Champions se tratase, dado que este triunfo los coloca en el primer puesto de la tabla, a falta de ver lo que ocurre mañana.

Tras esta imagen difuminada de lo que es el Barça, los aficionados tienen claro que el equipo no está funcionando como debería y ven un culpable claro, el técnico culé. Sus decisiones han sido muy cuestionadas, como apartar a Arthur Melo del equipo en los primeros partidos, siendo un titular indiscutible en él, como colocar a varios jugadores de la plantilla (como Griezmann y De Jong) fuera de sus verdaderas posiciones, impidiendo explotar el potencial de los mismos.

Fuente: EFE

Esta es sin duda una situación insostenible para la conjunto culé que, de seguir así, podría tener importantes dificultades para mantenerse vivo en las tres competiciones, teniendo a priori una de las mejores plantillas del mundo, la cual es evidente que necesita a un buen patrón que la gobierne.