“Si se lo cree, puede ser muchos años jugador del Barça”. No es poca cosa. Así definía a Fermín una de las grandes leyendas blaugranas que han ocupado su posición y el que es su entrenador actual, Xavi Hernández. En la sombra, sin hacer demasiado ruido y con un rendimiento constante, el canterano se ha ganado formar parte de la primera plantilla a todos los efectos. Pero todavía le queda mucho fútbol por mostrar.

    Fermín ante el Getafe (Photo by Cristian Trujillo/Quality Sport Images/Getty Images)

Su caso es digno de colgarlo en la puerta de entrada de la masía, como ejemplo paradigmático de que, con esfuerzo, se puede llegar a la cima del fútbol. Fermín, al que nunca se le ha nombrado como uno de los grandes talentos de la casa, pasó por todas las categorías, con una gran evolución física y futbolística, hasta que le llegó la oportunidad. Y el canterano no falló.

“Es dinámico, maneja las dos piernas, tiene chut de fuera del área”, añade Xavi respecto a su perfil. Posee un gran sentido de la colocación, recibe entre líneas, se gira con facilidad y entiendo los timmings para atacar los espacios: un centrocampista moderno en toda regla. El hambre por ganar que muestra cuando sale al terreno de juego y la humildad con la que vive su día a día le hacen una pieza indispensable para el grupo. ¿Merece más minutos? Pienso que sí. ¿Los tendrá? Solo Xavi lo sabe.