Japón ha sido el destino elegido por el Barça para hacer la pretemporada 2019/2020. Este martes 23 de julio ha tenido lugar el primer partido frente al Chelsea (1-2) en la Rakuten Cup, el patrocinador que colabora con ambas entidades, así como el anfitrión Vissel Kobe, equipo de Andrés Iniesta con el que se verán las caras el próximo 27 de julio.
Siendo el resultado lo menos destacado del amistoso, la prueba de hoy consistía en ver las caras nuevas de la plantilla, así como la oportunidad para los jóvenes canteranos y, por supuesto, los menos habituales. Valverde apostó en la primera parte por un XI muy habitual pero con la entrada en escena del nuevo crack francés, acompañado arriba de Ousmane Dembélé y Collado. Por detrás, un medio formado por ambos Busquets y la perla Riqui Puig, quien hiciera unos cuarenta y cinco minutos muy destacados. Atrás, Sergi Roberto fue el elegido para el lateral derecho, con Piqué y el recuperado Umtiti, y el incansable Jordi Alba por la izquierda. El primer gol del equipo inglés vino de un error en la entrega de Sergio Busquets, algo poco normal en él por su nivel de acierto, y jugada en la que Ter Stegen no pudo hacer nada. La otra cara de la moneda fue Riqui Puig, el catalán de 19 años que cogió en todo momento el timón del barco y mostró una personalidad que pone en duda su futuro en el primer equipo o mantener su ficha en el Barça B. Lo único claro es que la competencia no le asusta, y pese a la llegada de más jóvenes al centro del campo, él se quiere ganar un hueco y demostrarle al staff que sus características se adaptan perfectamente al juego de posesión que demanda el Barça desde la llegada de Cruyff. En cuanto al dúo francés, Griezmann se mostró muy participativo en la zona de falso nueve, muy cómodo como referencia y en la distribución de balón, y con destellos de crack en el juego combinativo. Todo lo contrario Dembélé, que pecó de imprecisión y erró en la toma de decisiones, llegando a desquiciar a la afición culé.
La segunda parte mejoró en fútbol, y tuvimos la oportunidad de ver el debut de Frenkie de Jong y del brasileño Neto. Rafinha volvió después de varios meses de lesión y cuajó un partidazo, ofreciéndose en ataque y esforzándose en el repliegue defensivo. Su buena actuación refuerza al Barça para poder hacer caja con una futura venta. El nuevo crack holandés también destacó en su primer partido con la azulgrana, realizando hasta 42 pases sin fallar ninguno, y mostrando que no se lo pondrá nada fácil al resto de centrocampistas que también luchen por un puesto. Malcom o Carles Pérez dieron muestra de querer, al menos, mantenerse en el primer equipo, mientras que Aleñá fue una de las notas más negativas por su impreciso rendimiento. Otra de las caras favorables de este primer partido fue el portero procedente del Valencia, que se presentó con seguridad en el juego de pies y salvó al equipo en los metros finales sin dar señales de titubeo. En cuanto al autor del único gol culé, Ivan Rakitic mantuvo su nivel cumplidor tras las vacaciones, y la clavó por toda la escuadra con un derechazo desde fuera del área. Valverde en rueda de prensa le elogió por todos estos años, aunque sorprendentemente, le mandó un mensaje de atención por la llegada de gente nueva y la sana competencia que tendrá para ser titular.
Sin aún sacar conclusiones, se han visto cosas muy positivas en el renovado equipo del Txingurri, que ahora sin algunas piezas claves que jugaron la Copa América, tienen que ofrecer todo su potencial para ganarse la confianza del técnico para el inicio de la temporada.