El FCBarcelona se alzó con la victoria frente al Leganés con un contundente 5-0 en un partido que dominaron de principio a fin. Nada más terminar el encuentro, el defensa francés afirmaba que habían tenido “un buen partido, con ocasiones de gol, con muchos goles y con bastante juego». Pese a eso, no dudó en aclarar que aun se podían mejorar cosas, si bien como él mismo dijo, “estamos en el buen camino”.

En cuanto a la vuelta al 4-3-3, fue cuestionado por si el equipo se sentía más cómodo con este sistema en vez de jugar con tres defensas. Lenglet afirmó que eso dependencia del partido y del rival; en este caso “hemos hecho un partido bastante completo, en el que hay que mejorar ciertas cosas, pero estamos bien. Hemos visto a un Barça contundente”.

Finalmente, haciendo hincapié en el gol que el propio Lenglet había marcado -el primero en Copa del Rey-, afirmó estar muy contento por ello y por su colaboración al equipo, sosteniendo que “hay que seguir así”.

En cuanto a Griezmann, como no podía ser de otra forma, se le preguntó si se veía jugando de 9 en el equipo, a lo que respondió contundentemente “yo aquí estoy para ayudar. Arriba, a la izquierda. Donde juegue. Lo que quiero es aportar cosas al equipo. Estoy acostumbrado a jugar por el centro, con el Atleti y con la selección. Sé donde moverme, tengo más libertad”.

En lo relativo a la adaptación al nuevo entrenador, reconoció que aún están aprendiendo; “Hay cosas que mejorar aún, pero creo que estamos en el buen camino. Tengo que ayudar, sea por dentro o por fuera. Estamos intentando aprender la manera de jugar del míster, que es diferente a la de antes. Estamos trabajando en ello y queremos sacar los partidos adelante.”

Sobre la verticalidad mostrada por el equipo en este partido, especialmente en comparación con los anteriores de la era Setién, Griezmann sostuvo que “los medios iban bien al espacio: y los de arriba también. Podemos aprovechar la velocidad que tenemos y en eso estamos. Para hacer daño.”

Para concluir, se hizo alusión a la camiseta con la que Griezmann había aparecido en el estadio, una camiseta de Kobe Bryant, quien ha fallecido hace apenas unos días en un accidente de helicóptero. El francés reconoció estar en shock y que con ese gesto quería hacerle un guiño a su manera.