Un nuevo recital ofensivo del Barça comandado por Robert Lewandowski sirvió para aniquilar al Real Valladolid en casa. Los de Xavi volvieron a endosarle cuatro goles al rival (4 – 0), tal y como hicieron en Anoeta ante la Real. El delantero polaco volvió a ser la referencia en ataque con un doblete y un taconazo de fantasía.

Xavi volvió a confiar en Balde de nuevo en lugar de Alba, no especuló atrás y apostó por Araujo y Eric como pareja de centrales -Christensen causó baja a última hora por un proceso febril-, y volvió a dejar clara su postura con la situación en el lateral derecho: Dest fuera de la convocatoria y Sergi Roberto al banquillo por segunda jornada consecutiva. Busquets volvió al once titular tras perderse por sanción la victoria a domicilio en San Sebastián y sorprendió que Raphinha saliera de inicio en lugar de Ansu Fati tras su gran actuación en Anoeta el pasado sábado, pero el brasileño no tardó mucho en darle la razón al míster.

El Valladolid de Pacheta, que venía de empatar en el Sánchez Pijuán contra el Sevilla, salió con la misma disposición táctica que los de Xavi Hernández: un clásico 4-3-3 con dos viejos conocidos en Can Barça por circunstancias totalmente distintas; Jordi Masip, portero del primer equipo y del filial durante años, y Sergi Guardiola, que firmó y fue despedido por el club el mismo día en 2015, tras descubrirse unos desagradables tuits suyos contra el club y Cataluña durante un Clásico en 2013.

Los de Xavi tuvieron el control del partido desde el inicio y el plan de ataque era claro; balones a Raphinha y a hacer daño por el carril derecho. El brasileño levantó a la grada en el segundo minuto de partido con un gran regate entre dos defensas del Valladolid que significó la primera acción de peligro del Barça.

Fuente: FC Barcelona (Twitter)

En el minuto 11 el Camp Nou cantó gol por un segundo tras un remate de cabeza de Lewandowksi que fue contra el poste de la portería de Masip, sobrevoló la línea de gol y que el propio delantero estuvo a punto de cazar el rebote de volea, pero no llegó por centímetros. Diez minutos más tarde, el Barça volvió a darse de bruces contra el poste; Dembélé culminó una gran jugada colectiva con un potente disparo que el larguero repelió hacia arriba.

En el minuto 24 llegó el primero del partido, tras un espectacular pase de rosca de Raphinha desde la banda derecha que Lewandowksi cazó al vuelo para hundir el balón hasta el fondo de la red. No es la primera vez que el virtuoso extremo brasileño pone balones con efecto al área que acaban en gol, pues ya patentó las ‘bananas’ en el Leeds y, por lo que parece, no será la última vez que asistirá así a Lewandowski esta temporada.

Cuando parecía que la primera parte moriría tras un entorpecido reinicio por la pausa de hidratación, una gran acción individual de Dembélé -de nuevo, desde la banda derecha- en el minuto 43 la acabó rematando Pedri llegando desde segunda línea con un gran disparo bajo pegado al poste derecho de la portería de Masip, que poco pudo hacer ante ese tiro.

La segunda mitad empezó tal y como terminó la primera; con dominio total del Barça. Tras varias ocasiones que se perdieron por el área o que la defensa del Valladolid rechazó, Xavi decidió realizar una triple sustitución a la hora de partido: Sergi Roberto por Araújo, desplazando a Koundé al eje de la defensa junto a Eric; De Jong por Gavi para reforzar el control de la zona de medios, y Ansu Fati por Raphinha para mantener viva la electricidad por la banda.

La jugada del partido llegaría cuatro minutos después de los cambios, en el 64; otra conducción de Dembélé llegaría a los pies de Lewandowski que, pudiendo rematar de cualquier manera, decidiría inventarse un taconazo de videojuego que acabaría entrando bajo la incredulidad de todo el estadio. El segundo gol del polaco levantó al Camp Nou, que rugió su nombre aún con más fuerza.

Fuente: FC Barcelona (Twitter)

En el tiempo de descuento y tras las entradas de Kessié por Busquets y Ferran por Dembélé, Sergi Roberto hizo el cuarto de la noche tras cazar un remate de Lewandowski que chocó contra el travesaño y que, de haber entrado, podría haber significado su tercer gol y su primer hat-trick con la camiseta del Barça.

Cabe destacar la gran actuación de ambos laterales: por la izquierda, Balde sigue en dinámica ascendente con sus veloces conducciones por la banda y su entrega en defensa, y Koundé por la derecha, muy solvente atrás, con grandes intercepciones, y también con buenos detalles técnicos ofensivamente.