Segundo partido tras el parón y segunda victoria para el Barça. Frente a un Leganés que demostró desde el minuto 1 que no pondría las cosas fáciles, los locales se armaron de paciencia para tocar y tocar frente a una defensa hiperpoblada. Finalmente, un buen gol de Ansu Fati y un Messi omnipresente que anotó desde el punto de penalti dieron la victoria al equipo de Quique Setién.
A continuación, las notas del partido:
Ter Stegen – 6,5. Pocas ocasiones tuvo para brillar durante el partido el meta alemán. En las dos llegadas más claras del Leganés llegó a estar batido porque poco o nada podía hacer, pero Lenglet en la primera y el palo después evitaron el gol. Sin embargo, su juego de pies fue siempre salvavidas para dar salida al juego, realizó una gran estirada para despejar un centro de Kevin Rodrigues que se envenenaba de más y salió con holgura a cortar un balón largo cuando Assalé se dirigía solo hacia la portería.
Sergi Roberto – 5. Paso casi de puntillas del canterano por el partido. Poca participación durante el primer tiempo dónde el rival estaba muy bien replegado. Fue sustituido en el minuto 62 por Semedo.
Piqué – 6. Partido correcto del 3 azulgrana. Dio salida al juego e incluso se animó con alguna incursión en la defensa pepinera cuando su equipo era incapaz de crear peligro. Un golpe en la espinilla le hizo salir del campo por precaución en el minuto 72.
Lenglet – 6,5. Un partido impecable más del francés. Parece que no está y de repente aparece con la manguera dónde más se le necesita. Salvó prácticamente bajo palos el que podía haber sido el 0-1 a disparo de Miguel Ángel Guerrero en el tramo inicial. Terminó jugando de central derecho cuando entró Umtiti y fue amonestado por un codazo en un salto con Guido Carrillo en el 83.
Firpo – 6. Partido con bastantes imprecisiones el del ex del Betis. Bastante errático en el pase y a veces perdido en defensa, aunque sin consecuencias. Sin embargo, suya es la asistencia del 1-0 a Ansu Fati tras pelear un balón en área contraria que había perdido él mismo.
Busquets – 6. Líder en una presión tras pérdida más que efectiva, comandando el centro del campo y siendo siempre apoyo para sus compañeros. Sin grandes exigencias defensivas, Busquets ordenó un centro del campo que, sin embargo, necesitó de Messi para subir un par de marchas necesarias.
Rakitic – 4. El croata se desgastó en defensa, realizó varias recuperaciones y estuvo atento en la presión, pero se sigue esperando más de un jugador como él. En ataque, totalmente desaparecido. frenando constantemente la velocidad del juego e incapaz a la hora de encontrar huecos en el entramado de Javier Aguirre.
Arthur – 5. Ni se acerca al nivel que se le presupone. En Camp Barça siguen esperando al mejor Arthur, pero el brasileño no tuvo su noche más inspirada. Se ofreció siempre para dar oxígeno al juego, dejando destellos con su capacidad para retener el balón, aunque fue incapaz de acelerar alguna jugada lo necesario como para amenazar la zaga pepinera.
Ansu Fati – 8. De lo más destacado del primer tiempo. Junto a Messi, el único que fue capaz de generar algún desborde o intimidar lo suficiente para que el Leganés pudiese llegar a desordenarse. Suyo fue el primer gol con un buen disparo desde fuera del área al palo largo de Pichu Cuéllar. El Camp Nou sigue alucinando con él. Fue sustituido en el 52 para dar entrada a Suárez.
Griezmann – 5. Aún sin Suárez, Setién lo colocó como delantero centro y se le volvió a ver poco entre los centrales. No se puede decir que no lo intente, porque realiza desmarques constantes y se compromete en defensa, pero está a años luz del motivo por el que se le trajo. Encima, un fuera de juego por centímetros de Semedo, en el que tuvo que intervenir el VAR, le privó de anotar el que hubiese sido el 2-0.
Messi – 9. Superlativo. Si nosotros teníamos ganas de fútbol, Messi debía estar que se subía por las paredes. Se le vio cómo en grandes noches. Enrabietado, peleón y driblando rivales sin parar. Bajó a recibir, se ofreció al espacio e incluso dejó jugadas ‘maradonianas’ (o ‘messianas’) como la que termina en un penalti que él mismo se encargó de anotar. Qué vamos a decir de Messi que no se sepa.
Suárez – 5. Entró en el minuto 52 por Ansu Fati y pasó bastante desapercibido. Fallón en algunos controles e incluso en el remate, lo que no denota mas que estar todavía en plena fase de recuperación. Poco a poco cogiendo ritmo y minutos. El Barça le necesita en la mejor forma lo antes posible.
Semedo – 6. Entró en el 62 por Sergi Roberto y, si bien el canterano pasó bastante desapercibido, Semedo logró amenazar en varias ocasiones al espacio. En una de ellas, logra ganar la espalda a la defensa y asistir a Griezmann para que definiese a placer, pero lo anuló el VAR.
Arturo Vidal – 6. Gran temporada la que está realizando Arturo Vidal. Muy regular, cumpliendo sus funciones y aportando un plus distinto que los demás centrocampistas. Siempre esforzado en la presión y amenazando con alguna llegada, aunque hoy no le llegó la ocasión.
Riqui Puig – 7. Se hablaba de que podía ser incluso titular, pero Setién le reservó únicamente los últimos 18 minutos más el descuento. Estuvo muy participativo, despierto y con ganas de demostrar. Se atrevió incluso a lucir velocidad punta en algún desmarque al espacio, tuvo una ocasión con chut desde fuera del área y a punto estuvo de marcar en un mano a mano que detuvo Cuéllar. Si sigue aprovechando así sus oportunidades, me da que le veremos más.
Umtiti – 3. Ni está ni se le espera. Entró por prevención debido al golpe de Piqué los últimos minutos. Tuvo poco trabajo, pero en una de las pocas ocasiones que se le exigió, llegó tarde, se llevó una tarjeta y no podrá estar ante el Sevilla al cumplir ciclo. Justo cuando se le podía necesitar debido a la posible baja del ‘3’.
Quique Setién – 5,5. Partido previsible, lógico y a la vez inteligente el que planteó el cántabro. Era cuestión de esperar la oportunidad ante un rival encerrado que se iría desgastando con el paso de los minutos y, efectivamente, ocurrió. Setién suma una victoria más para seguir líder y convencer al barcelonismo de que puede ser su técnico algunos años más. Sin embargo, en partidos como este, desde la grada (ahora, desde el sillón) se le pide que se atreva más con los jóvenes y sobre todo con un Braithwaite que merecía minutos.