Los primeros meses de Sergiño Dest en Barcelona están siendo un poco agridulces. El defensa norteamericano ha combinado grandes actuaciones en el lateral derecho con otras donde prácticamente ha estado inédito. Además, al principio por circunstancias tuvo que ocupar la banda izquierda en varias ocasiones, posición donde puede servir como parche, pero no es capaz de explotar sus virtudes. Asimismo, en el último mes y medio ha estado arrastrando unas molestias que no le están permitiendo asentarse en el puesto y gozar de la continuidad necesaria para alguien de su edad. Ahora, con el 3-5-2 como carrilero, está acercándose a ser ese jugador que se espera que sea.

A propósito de sus grandes actuaciones, Dest ha demostrado tener el potencial necesario para ser el lateral derecho titular del FC Barcelona, con todo lo que ello conlleva. La mejoría con respecto a Nélson Semedo es evidente. El conjunto blaugrana con Dest ha recuperado la profundidad que el lateral portugués estaba siendo incapaz de dar durante sus últimas temporadas. Del mismo modo, Dest es superior para jugar con pocos espacios y es más peligroso cuando alcanza línea de fondo, cualidad que estaba echando en falta el Barça con Sergi Roberto (no es ese tipo de lateral) y Semedo.

Sus peores minutos hasta la fecha han llegado cuando el conjunto de Ronald Koeman ha volcado el juego hacía el costado izquierdo, dejando a Sergiño Dest abandonado en la derecha. De hecho, la presencia de Jordi Alba en el costado contrario y la de Messi o Griezmann en su banda ha perjudicado en sobremanera a un Dest que durante muchos partidos ha tenido que buscarse la vida por su cuenta. A pesar de la dificultad que conlleva jugar sin apoyos, el estadounidense ha sido solvente en la mayor parte de ocasiones.

Dest en el partido de Copa ante el Sevilla. Fuente: Getty

Con el 3-5-2 la cosa ha cambiado y se está viendo a un Dest más liberado en fase ofensiva. El estadounidense ya no tiene que estar tan pendiente de guardar su espalda cuando se incorpora en ataque, una de sus debilidades teniendo en cuenta que el Barça normalmente presiona y juega en bloque alto. Su peor encuentro fue en la ida ante el PSG viniendo de lesión, donde Mbappé le buscó, le encontró y le atacó constantemente en el 1 vs 1. Sin embargo, desde entonces está encontrando la continuidad que necesitaba para desarrollar su juego y asentarse en el equipo.

En definitiva, Sergiño Dest está combinando partidos con grandes actuaciones y otros donde su influencia no acaba de ser la esperada. De todas formas, el joven lateral derecho necesita tiempo para seguir creciendo y evolucionar el gran potencial que ya ha demostrado tener.