16-10

Clásico entre hermanos

Uno de los mayores alicientes del primer mini-clásico desde 2014 era ver el cara a cara entre los hermanos Aranda, Antonio y Óscar, pero tras los 90 minutos pareció que los 22 jugadores compartían algún tipo de parentesco después de un partido en el que no hubo colmillo ni ambición.

El Barça B, en un ejercicio que recordó al primer equipo, terminó el partido sin un solo disparo a puerta. Por su parte, el Real Madrid pudo hacer mucho más daño al equipo de Barjuan, pero prefirió cuidarse en salud y no romper el partido. Decepcionó un enfrentamiento que, seguramente, ilusionaba más a prensa y aficionados que a los propios equipos.

El filial del Barça, que entró bien en el partido marcando el ritmo de la mano de Jandro y recuperando el balón arriba, no fue capaz de poner en aprietos al equipo de Raúl González. Pronto se estableció en una posesión estéril, con mucha circulación entre centrales, pero muchas dificultades para encontrar a los interiores entre líneas. Aranda y Jutglà intentaron amenazar al espacio entre carrileros y centrales, pero sus intentos fueron en vano.

Con el paso de los minutos, el B perdió la paciencia y el ritmo de ida y vuelta favoreció al Castilla, que encontró situaciones favorables para los extremos madridistas Peter y Óscar Aranda, que se exhibieron en los 1 contra 1 ante Guillem Jaime y Arnau Solà, que fue amonestado pronto.

El mini-clásico decepcionó por la falta de ambición de los equipos | FC Barcelona B

El peligro en bandas del Madrid provocó la entrada de N’Diaye en el descanso para no arriesgar a Solà, y el “15” cuajó un buen encuentro anulando en gran medida al extremo dominicano Peter. Sin embargo, el aire fresco llegó con la entrada de Abde, que volvió a ser importante a la hora de generar peligro en ataque.

El marroquí, ex del Hércules, se impuso en el regate, ganó duelos y centró con criterio, pero un poco acertado Rodado no llegó a rematar en buenas condiciones. El peligro en transición de Abde revivió también a Jutglà, que disfruta con espacios y también sacó al equipo en un momento del partido donde el Castilla los hundía en campo propio.

En el aspecto defensivo, estuvo especialmente sólido Mika Mármol junto con N’Diaye, que frenaron primero a Peter y después a Marvin en el perfil diestro con un Arribas siempre amenazante por dentro. Al pitido final, 0-0 que sabe a muy poco para ambos, pero que vuelve a dejar, una semana más, malas sensaciones en cuanto a juego al Barça B.