El entrenador del FC Barcelona, Xavi Hernández, ha vuelto a elogiar a Ousmane Dembélé en el regreso del atacante galo tras su positivo por covid-19. El crack francés ha devuelto la calma a los azulgranas con un disparo ajustado al palo que ponía el empate frente al Linares. Además, el ‘mosquito’ ha titubeado con el doblete con un testarazo que repelía el larguero. A la postre, a pesar de un resultado tan corto, el Barça ya está en los octavos de la Copa del Rey.

Si bien el técnico de Terrassa ha alabado de nuevo a un Dembélé decisivo, también ha dejado entrever su preocupación con su difícil renovación: “Lo hemos necesitado, ha cumplido, ha marcado diferencias, ha marcado un gol y ha podido marcar otro golazo. Ha jugado bien, es lo que queremos de él. Futbolísticamente, nada que decir, estoy contento con él. Del tema renovación no hay novedad”.

Más allá de los aspectos tácticos por pulir tras el descanso, Xavi tenía claro que su equipo era mejor que el rival y que había que demostrarlo sobre el terreno de juego: “Era creérselo, llegar al área y dar todos un paso al frente. Les he dicho que podríamos hablar tres horas de táctica, pero era una victoria de fe. No podíamos relajarnos, quizás por eso he estado más intenso”.

Respecto a los fallos que dificultaron el partido más de lo esperado, el entrenador azulgrana ha admitido que “no supimos encontrar la superioridad pese a que buscábamos dos contra uno en banda. En el tramo final del partido he cambiado a 4-3-3 porque donde nos hacían daño de verdad era en las bandas”. El egarense tampoco cree que la primera parte el Barça jugase tan mal, “pero como nos han marcado ellos deja peor sabor de boca”.

Este nuevo formato de Copa, con eliminatorias a un solo partido y en el campo del equipo inferior, incrementa el espectáculo pero complica el pase a conjuntos teóricamente superiores. De todas formas, Xavi ya se lo esperaba: “Era un día complicado, todo el mundo esperaba una goleada y el fútbol ya no es así. Todo el mundo se ordena, cuesta ganar y nos ha costado”.