Iñaki Peña – 6: El arquero alicantino volvió a salvar al conjunto azulgrana de más de un susto innecesario. Muy activo en todo momento e incluso recuerda a ter Stegen con algunos movimientos muy característicos del alemán. Poco pudo hacer ante el golazo de Guillamón, totalmente fuera de su alcance.

Joao Cancelo – 5,5: El portugués regresó al carril derecho con mayor prudencia de lo habitual en ataque y con las mismas carencias en defensa. Sin embargo, compensó su inseguridad defensiva con internadas cada vez más habituales que la continuidad del juego del equipo agradeció. Su inconsistencia defensiva terminó pesando más al final del partido.

R. Araújo – 6: El central uruguayo creció con el paso de los minutos y demostró que, en circunstancias normales, su presencia en la zaga azulgrana es un seguro de vida. En la segunda parte, la relajación defensiva desembocó en el empate del Valencia. En la acción del gol pudo haber hecho más para tapar el cañón de Guillamón. Volvió a dar la cara por el equipo lanzándose al ataque en los minutos finales con un potente disparo lejano que salió levemente desviado.

Koundé – 5: El central francés demostro una mayor constancia en el mantemiento de la posición con respecto a sus últimas actuaciones e incluso se atrevió con alguna aventura en ataque. La relajación defensiva se vio reflejada en su progresiva pérdida de la jerarquía. Rompió el fuera de juego en la acción que terminó en el gol de Guillamón.

Balde – 5,5: Su vuelta al lateral izquierdo fue agradecida por el equipo dando profundidad con sus eléctricas incorporaciones. Sin embargo, le faltó un poco más de convicción a la hora de poner balones al área. Su regreso al nivel ofrecido la temporada pasada ha comenzado.

F. De Jong – 7,5: Al centrocampista holandés se le hace cuesta arriba cuando tiene dos oponentes encima presionando su salida del balón. Su desempeño durante la primera parte fue destinado a la solidaridad defensiva en detrimento de la creación de juego. En la segunda parte, el equipo se lanzó al ataque y de las botas del holandés nació el gol de Joao Félix con un exquisito pase con el exterior para que Raphinha asistiera al portugués. Minutos más tarde buscó repetir la hazaña con otro pase quirúrgico hacia Lewandowski que el polaco apenas pudo llegar a controlar. El empate del Valencia frustró al holandés que, tras protestar una falta lanzando su bota contra el suelo, vio la amarilla y se perderá el último partido del año en Montjuïc ante el Almería.

Gündogan (80′) – 5,5: El peso de la creación del juego volvió a recaer sobre el centrocampista alemán. Aportó la pausa necesaria cuando el equipo no contaba con suficientes jugadores en zona de ataque y buscó el último pase en varias ocasiones mediante su pase picado marca de la casa. Sin embargo, las dos veces que recibió el balón en el área pequeña, el control se le fue largo y no pudo girarse para rematar cómo sí lo pudo hacer con éxito ante el Girona. En la segunda mitad su protagonismo disminuyó y terminó siendo sustituido por Lamine Yamal para buscar mayor velocidad en ataque.

Pedri – 7: El canario desatascó la salida del balón, sin duda una de las asignaturas pendientes del equipo tras los últimos encuentros. Excelente visión al primer toque para escapar de la presión y salir al contraataque sin mayor complicación. Tuvo una de las ocasiones más claras de la primera mitad con un disparo que se marchó por arriba. Junto a Frenkie, trató de mantener el equilibrio del equipo junto durante los últimos 45 minutos.

Raphinha – 5: Fue el jugador más incisivo del ataque azulgrana durante la primera parte junto a Lewandowski. Encontró en Joao Cancelo un socio en la banda derecha y buscó el área valencianista con sus patentados centros enroscados. Sin embargo, sus peligrosas pérdidas en zona de tres cuartos pudieron poner al equipo en apuros. En la segunda mitad, el brasileño sumó una asistencia más a su cuenta personal con un inteligente pase que habilitó a Joao Félix para que empujara el balón a placer. En el gol del empate del Valencia pudo haber aportado más en la ayuda defensiva, ya que era el jugador que estaba más cerca de Guillamón. Confirmó su desgracia de cara a puerta con un fallo inverosímil en un uno contra uno totalmente solo ante Mamardashvili. Terminó el partido destrozado, totalmente desolado.

Joao Félix (71′) – 5,5: Parecía que el portugués había levantado el pie del acelerador tras su redención ante el Atlético. Durante la primera mitad, la mayor parte del peligro por su banda llegó desde atrás gracias a las incorporaciones de Balde. Sin embargo, las veces que conectó con Pedri se vieron destellos de lo que podrían llegar a generar con su asociación. Su incidencia en el juego sin balón se vio recompensada con su tercer gol de la temporada en Liga tras un pase de la muerte de Raphinha.

Lewandowski – 4: Pasan las jornadas y el delantero polaco evidencia que cada vez está más lejos del nivel que mostró la temporada pasada. Impreciso en el control, lento en la toma de decisiones y desacertado de cara a puerta. No obstante, no dejó de buscar la portería de Mamardashvili que, en el minuto 28, evitó que se redimiera de sus erroes tras negarle un espectacular remate de tijera. Minutos más tarde tuvo otro mano a mano ante el guardameta georgiano que, sorprendentemente, no supo resolver. Lamentablemente, más de lo mismo en la segunda mitad.

Ferran (71′) – 4,5: ‘El Tiburón’ de Foiós no pudo sembrar el pánico en Mestalla. No pudo materializar la primera que tuvo nada más entrar y le faltó un segundo para resolver la última ocasión del partido. El delantero valenciano necesita continuidad para recuperar su mejor versión.

Lamine Yamal (80′) – NC

Xavi – 4: Se notó una mayor implicación del equipo en el juego, en gran parte favorecida por enfrentarse a un equipo que no suele llevar la iniciativa. Acertó con la alineación, pero no con el planteamiento. El equipo volvió a tener picos en el desarrollo del juego, exceliendo en los momentos más altos y siendo un caos en los más bajos, demostrando una vez más que la clave está en la constancia. Debe poner fin a las jugadas de peligro que desembocan en centros sin destinario, pero sobre todo debe encontrar la manera de que el equipo no se desconecte en defensa con tanta frecuencia. De nuevo, los cambios fueron los acertados, pero llegaron tarde como es habitual. Pese a la leve mejora, el equipo necesitaba ganar para aprovechar la derrota del Atlético y recuperar sensaciones. El empate aleja a los azulgranas de la carrera por La Liga.