27.694 espectadores en Stamford Bridge apretaron a un Barça dominador con el balón. Desde hora y media antes del partido los aficionados blues ya llenaban las calles cercanas al estadio con camisetas y bufandas del Chelsea hasta tal punto que había calles cerradas.

Tras el ondeaje de las banderas blues y hacer sonar el himno de la Champions en lo que ya no era una noche, sino un día de estrellas (12:30h), el Chelsea empezaba a mover el balón lanzándolo hacia la parte del campo defendida por el Barça.

No tardaron demasiado las azulgrana en acercarse a la portería defendida por Berger. En el minuto 3, Graham Hansen hacía su jugada favorita, partiendo abierta desde el extremo y adentrarse hasta la frontal del área y lanzar el balón al fondo de la meta esquivando la estirada de Berger. Sweet Caroline anotaba en la portería del ‘Iniestazo’.

Primera parte con dominio azulgrana. Empezaron bien las culés, generando peligro y provocando problemas a la defensa inglesa. Salma, Rolfö y Geyse, las más activas en ataque. 

El susto del Chelsea

Pero el Chelsea, mediante Sam Kerr corriendo por la banda derecha y asistiendo a Guro Reiten, que enviaba el balón al fondo de la portería de Sandra Paños, aprovechó esta ocasión para enchufarse al partido.

Aunque la árbitra asistente levantaba el banderín y el empate quedaba anulado por fuera de juego de la australiana, las culés ya vieron lo que las jugadoras del Chelsea son capaces de hacer.

A partir de este momento, las blues apretaban más y se apoderaban del peligro, pero no del balón. Sam Kerr, Guro Reiten y Erin Cuthbert, las más proactivas.

En la segunda parte, Emma Hayes incorporaba a Lauren James en el once en busca de gol. Con la británica como punta junto a Sam Kerr y las blues podían acercarse otra vez a la portería defendida por el Barça. Pero todo se quedó en acciones blandas.

El Barça fue el claro dominador de la segunda parte, más de lo que ya lo había sido en los primeros 45 minutos. Geyse se iba del terreno de juego para que entrara Mariona, que no tardaba en hacer maravillas y poniendo calma al juego.

A los 20 minutos para terminar el partido llegaban las peores noticias para el Barça. Lucy Bronze se tumbaba en el césped y Marta Torrejón, sin calentar, se colocaba en su posición. La británica se iba al túnel de vestuarios sin poder apoyar la rodilla. Unos minutos más tardes, la lateral volvía al banquillo caminando por su propio pie, lo que tranquilizaba a la afición azulgrana.

Últimos minutos con más protagonismo del Barça, pero sin llegar a tener ocasiones claras para poner el 0-2 en el marcador. Solo Rolfö obligaba a que Berger tuviera que poner la mano para evitar el segundo del Barça.

Un total de 27.694 espectadores se desplazaron a Stamford Bridge para ver un espectáculo futbolístico de su equipo, pero terminaron viendo un rondo del Barça.

Cada vez que el conjunto inglés intentaba lanzar hacia arriba buscando la peinada de Sam Kerr para que Guro Reiten recibiera, tanto Mapi como Paredes y Patri por delante, evitaban que la noruega cazara el balón y este pasaba a ser para el conjunto visitante.

También las mediocentros estuvieron excelentes. Aitana organizando, Patri muy atenta a las peinadas por delante y Keira Walsh siendo la jugadora con más recuperaciones tras pérdida. Todas pedían calma cuando el equipo se precipitaba en busca del gol y llevaba a perder el balón.

No tener el esférico ante un equipo como el Chelsea siempre es peligroso por los contraataques que pueden llegar a crear de la nada, pero Jonatan Giráldez supo ponerle remedio.

Caroline Graham Hansen se mereció el premio a mejor jugadora del partido no solo por anotar el único gol. Partido muy serio del Barça, que supo qué hacer en cada momento del partido y lo llevó por sus riendas. Aún así, todo por decidir a la vuelta en el Spotify Camp Nou el jueves 27 a las 18:45h.