Koeman está siendo muy discutido por la irregularidad que está teniendo el Barcelona en Liga. Una de las críticas que se le hace es el cambio continuo de sistemas en los partidos que está evidenciando la falta de identidad que sufre el equipo. Aunque, también se le recrimina que apueste por jugadores que no están a un buen nivel, que la defensa no esté bien trabajada, la debilidad en las jugadas a balón parado, que no cuente con ciertos canteranos… Pero, al César lo que es del César y, si alguien es responsable de que Pedri y Dembélé estén mejorando la cara del equipo, ese es Ronald Koeman.

El jugador revelación del equipo claramente está siendo Pedri. El tinerfeño llegó con la ilusión del niño que siente el escudo y los colores como ningún otro, con ganas de trabajar y de hacer su propia historia humildemente. No han sido pocos los que han pedido paciencia con él, considerando que se le daba demasiadas oportunidades de titular y debía entrar poco a poco. El problema es que cuando tienes un jugador de dieciocho años que entiende el fútbol como si se hubiera criado en La Masía, tienes que darle la oportunidad como en su momento la tuvieron otros grandes. Koeman vio que Pedri tiene algo diferente, que aporta algo más que no había en el equipo y, para colmo, el canario se desvive ayudando sin balón tanto en presión como en defensa, así lo demuestran los datos que reflejan que en el último partido corrió trece kilómetros.

Pedri ante el Éibar. Fuente: Getty Images

Desde que empezó la temporada, Koeman ha probado a Pedri en diferentes posiciones: media punta, pivote, extremo izquierdo e interior. En el doble pivote el canario no puede explotar sus mejores habilidades porque está demasiado retrasado del juego, él necesita poder ir más hacia el centro y que el balón pase por él. Como extremo izquierdo firmó un gran partido en Turín donde ya dejó detalles de lo que puede aportar al equipo y demostró poder jugar ahí sin problema porque también tiene interiorizado el ser solidario en defensa. Pero, las dos mejores posiciones para él son la media punta y el interior del centro del campo.

Cuando Koeman ha apostado por el sistema 4-2-3-1 y le ha colocado de mediapunta, el canario está en su salsa porque es la posición perfecta para participar en todas las jugadas, estar cerca del área y tener mayor libertad de movimiento para combinar. Ahora que parece que Koeman apuesta más por el 4-3-3, el interior izquierdo es para el canario. ¿Qué provoca esto? Principalmente, que el canario esté bien posicionado y pueda dar lecciones de fútbol como las que ha dado en los últimos partidos. Además de eso, está en la zona propia para la creación del juego, pero también para combinar con los de arriba, especialmente con Messi, con quien parece haber creado una asociación de espectáculo futbolístico.

Pedri y Messi celebrando un gol. Fuente: Getty Images

El caso de Dembélé no es fácil porque es un jugador de cristal. Eso lo sabe el cuerpo técnico actual y los anteriores que han trabajado con el francés, pero el actual es el que ha dado un paso adelante con el plan específico y los entrenamientos personales para que el francés mejore físicamente. Ese trabajo tampoco serviría de nada si el jugador no pusiera de su parte, por suerte no es el caso. A pesar de todas las lesiones y de lo que costó su fichaje, Ousmane Dembélé no se ha rendido y esta temporada no solo está demostrando que tiene nivel para el Barça, sino que el equipo necesita el perfil de un futbolista como él para explotar sus mejores virtudes.

La mejoría física está haciendo posible que veamos la mejor versión hasta ahora del francés. Las grandes capacidades siempre las ha tenido. No es fácil encontrar un futbolista como Dembélé, pero si encima se implica en el juego y en ser solidario con el equipo, va a ser difícil sacarle del once titular. Koeman ha apostado por él en ambas bandas y Ousmane ha respondido igual de bien porque maneja las dos piernas con la misma facilidad. Sin embargo, su versión goleadora la hemos visto cuando ha jugado por el flanco derecho, a pesar de, por ejemplo, tirar con la derecha los penaltis y los córners, parece tener más confianza para buscar puerta a pierna cambiada por la banda derecha.

Dembélé haciendo un gran control. Fuente: Getty Images

¿Se ha ganado ser titular indiscutible? Teniendo en cuenta que no está Ansu Fati, que Griezmann no acaba de explotar y que las cualidades de Braithwaite, por mucha actitud que le ponga, son limitadas para jugar en el Barça, Ousmane Dembélé debe ser titular indiscutible en este equipo. ¿Qué aporta al juego del Barcelona? Simplemente con posicionarse en la banda genera la amplitud necesaria para que los interiores y Messi encuentren espacios para combinar por dentro. Además, la habilidad que tiene para recortar en una baldosa, el cambio de ritmo en décimas de segundos, la arrancada veloz que le permite romper líneas y, para colmo, la añadida capacidad goleadora, hace que Dembélé, si está bien físicamente, sea una pieza indispensable para el Barça. Koeman no tiene otro jugador disponible con sus características ni su rendimiento. Numerosas son las muestras del cambio de Ousmane como, por ejemplo, el liderazgo que tuvo frente al Atlético de Madrid. Pero, la más importante, es que por fin parece entender el ritmo de juego del Barça, cuándo debe combinar, cuándo jugársela él… ‘El Mosquito’, si las lesiones le respetan, al fin parece estar llamado a ser un jugador importante para el Barcelona.

Dembélé ante el Athletic. Fuente: Getty Images

Tanto Dembélé como Pedri han sido apuestas de Koeman y se le reconoce el mérito, pero sin el trabajo personal que realizan ellos, hubieran sido apuestas vacías. Los dos siguen teniendo margen de mejora porque sus capacidades así lo demuestran, pero van por el buen camino.