Riqui Puig colorea un partido gris

Una victoria tras un partido gris sigue siendo una victoria. Con eso puede quedarse el F.C. Barcelona, que venció por 0 a 2 al Elche en su visita al Estadio Manuel Martínez Valero. Koeman sorprendió poniendo a Umtiti como pareja de Araujo en defensa, mientras el resto del once fue calcado al del pasado partido con el Cornellà. De Jong, Pedri y Dembélé fueron los nombres propios destacados del equipo catalán en un partido falto de emociones fuertes.

El Elche de Jorge Almirón quiso salir a jugar aprovechando los contrataques al equipo visitante y tuvo buenas ocasiones ante la portería blaugrana. Lucas Boyé y Emiliano Rigoni pusieron probaron en más de una oportunidad a Ter Stegen. Durante la primera mitad de partido los de Koeman fueron ganando el control pero Dembélé parecía ser el único capaz de desequilibrar a la defensa franjiverde en los metros finales.

El gol del desempate llegó en el 38’. Braithwaite centró desde la izquierda para Griezmann, pero el defensa Diego González tocó el balón antes que el francés y con Edgar Badía en el suelo, el balón se fue directo a las redes. De Jong aseguró el gol con un toque sobre la línea de gol. Con el gol, el Elche se vio obligar a tomar la iniciativa en ataque e intentó responder con una ocasión de Josan que detuvo Ter Stegen y el Barça se marchó con ventaja a los vestuarios.

En los primeros minutos de la segunda parte, el partido pudo haber cambiado radicalmente. El centrocampista Emiliano Rigoni tuvo la oportunidad de empatar el partido para el Elche en el 85’. Mingueza se equivocó en controlando un balón alto y el jugador del Elche se escapó para encarar a la portería culé, pero su disparo en el mano a mano fue inofensivo y Ter Stegen frustró la ocasión.

Más allá de las posesiones prolongadas, el equipo culé no transmitía una sensación de superioridad y carecía de contundencia en ataque. El paso de los minutos ponía en tensión a los visitantes, que ganaban por la mínima, esa ventaja peligrosa porque puede esfumarse en una sola jugada. Intentó Koeman refrescar el ataque sacando a Dembélé, el jugador que más desequilibró en ataque, y dando entrada al cuestionado Trincão.

Y el portugués no hizo una mala actuación. Tuvo dos oportunidades claras que casi terminan en gol. En el 83’, se fabricó una gran ocasión en la derecha de la frontal, que despejó con un manotazo el portero del Elche, Oscar Badia. Tuvo otra el extremo derecho en el 85’, cuando cabeceó en el área un centro de Griezmann y su remate volvió a toparse con Badia.

El segundo gol lo trajo otro jugador. Salió Riqui Puig en el 87’ y justo un minuto encontró la ocasión. Frenkie De Jong, el mejor del partido, se escapó dejando atrás a los defensas locales, llegó hasta el área pequeña y centró para que Puig hiciera el segundo con un toque certero de cabeza. Un gol de cabeza de un jugador que mide 1,69 y destaca en su juego por otras cualidades fue sin dudas la nota de color de un partido plano. Poco ocurrió tras el gol que certificaba la victoria blaugrana.

El Barcelona suma tres puntos que no dejan de ser vitales para mantenerse en la lucha por La Liga. Pero el equipo dirigido por Ronald Koeman no presenta mejoras en lo que es un mes difícil para los culés. Por su parte, Riqui Puig sigue pidiendo y mereciendo minutos que el entrenador holandés se resiste a darle. No aparecen síntomas de mejora en el Barça.