El Barcelona de Xavi Hernández no se levanta de una que ya se encuentra con una nueva piedra en el camino. San Mamés no ha sido un peaje gratuito y los azulgrana perdieron a dos de sus mejores valedores de la medular ante el Athletic Club de Bilbao (0-0). Una valoración que también ha ratificado el propio Ilkay Gündogan en los micrófonos de LaLiga TV: “Perdimos a dos jugadores que aportan al campo cualidades que otros jugadores no aportan. Pero somos el Barça y tenemos la responsabilidad de ganar con quien esté en el campo”. Y he ahí el quid de la cuestión.
¿En qué situación queda un Barcelona despojado de sus tres mejores centrocampistas -Gavi, de Jong y Pedri- ante un calendario vertiginoso para el cierre de la temporada? Pues bien, la razón principal, independientemente de los elegidos, pasa por un mayor compromiso y entrega. Porque sí, puede salir Ter Stegen a decir que no le gusta que se hable de falta de ambición, pero lo cierto es que los últimos minutos parecían carecer de importancia para los pupilos de Xavi. Un escenario idílico para demostrar orgullo, por encima de todo, así como recortar puntos a Girona y Madrid. Sin embargo, la realidad está claro que es otra. Era incluso contraproducente pensar que este Barcelona pudiera gozar de oportunidades reales como para competir la Liga.
Gündogan necesitado de escuderos
Viendo el panorama, el único jugador diferencial que le queda al técnico egarense es Gündogan, pero también cabe decir que no en una posición cualquiera. Para lucir y dar lo mejor de sí necesitará a acompañantes que le permitan percutir en zona de tres cuartos. Uno de los nombres es Fermín López. El canterano ha perdido algo de protagonismo en comparación con el primer tramo de la temporada y sus opciones para recuperar el rol de titular cobran ahora más sentido que nunca.
Por otro lado, fruto de la necesidad, Xavi Hernández ha instalado a Andreas Christensen como pivote, como experimento temporal, y lo cierto es que no está funcionando mal del todo. Ahora bien, contra rivales que te exigen en transiciones puede llegar a ser un problema, con el horizonte cercano de la Champions como referencia. Por no hablar de Oriol Romeu, quien cada vez ha contado con menos protagonismo y su nivel ha ido de más a menos. Sergi Roberto por su parte ha tenido partidos en los que no lo ha hecho mal, por lo que puede ser una baza a tener en cuenta, a no ser que a Xavi Hernández le dé por reubicar de nuevo a Raphinha como interior o ‘alma libre’.
‘La Masia’, una solución a tener en cuenta
Para cerrar este epílogo sobre el caos que tiene Xavi en el centro del campo no hay tampoco que olvidarse de lo que tienes en casa. Jugadores como Marc Casadó insisto que deberían tener una oportunidad, porque si no es en este contexto no va a ser nunca y es algo que puede acabar de precipitar su salida a final de temporada.
Quién sabe si otros nombres que vienen sonando con fuerza desde abajo – véase Pau Prim, Marc Bernal o Unai Hernández– acaban teniendo oportunidades de aquí a que el técnico de Terrassa termine su etapa como entrenador del Barça.
El dilema de Gündogan: ¿en la base o mediapunta? - INIESTAZO
marzo 5, 2024 @ 7:25 pm
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